La �ltima presa
by Carlos Donofrio. alberdi227@gmail.com


Acosada por una banda de maleantes, una mujer se transforma de presa en cazadora. Parte final de
una historia en elaboraci�n.

�

Haciendo su despliegue de superioridad, Suze despach� limpiamente a los dos hombres entrenados
que quedaban. No ahorr� ni un poco de la brutalidad de la que, hab�a descubierto en las �ltimas
horas, era muy capaz. Su fuerza y habilidades de gimnasta y bailarina le permitieron ocuparse de
ambos hombres con facilidad.

Despu�s de lanzar una �ltima fr�a mirada a los cad�veres, se dirigi� hacia el lugar donde estim�
que Mark estar�a peleando con Big Joe, en otra sala del cuartel. Suze confiaba en que Mark,
campe�n invicto de de kickboxing y versado en numerosas artes marciales podr�a, ahora que el
criminal no ten�a tras de s� todo su peque�o ej�rcito (que ella hab�a destruido durante su noche
de cacer�a, en la que pas� de ser la presa a ser la feroz cazadora) podr�a derrotarlo, a
diferencia del d�a anterior cuando Big Joe lo noque� luego de una dura paliza. Por eso acept�
Suze que fuera s�lo tras �l, mientras ella ultimaba a los restantes miembros de la banda. Despu�s
de todo, a pesar de la proeza de haber enfrentado con espont�neas artes guerreras a todos los que
quisieron capturarla, y de haber logrado as� liberar a Mark del cautiverio de esta banda, no
dudaba ni por un segundo que si alguien pod�a derrotar a ese monstruo, ese era su novio. Casi tan
grande y musculoso como �l, y con a�os de experiencia de combate. Mientras que ella, aunque con
la formidable fuerza y agilidad que le daban su muchos a�os de dedicaci�n sin pausa a la gimnasia
y el baile, no hab�a nunca tenido ninguna inclinaci�n por los deportes de combate. Suze admir�
siempre la habilidad de Mark y sus triunfos, pero apenas si hab�a aceptado de �l algunas
indicaciones b�sicas para la defensa personal. Indicaciones que esta noche se hab�an probado muy
�tiles.

Apenas entr� a la sala donde Mark hab�a alcanzado a Big Joe, su cara se transform� en una
expresi�n de horror. Su amado estaba al borde de ser noqueado por Big Joe, que continuaba con un
ataque aplanador. Tan brutal parec�a que Suze temi� que fuera a matarlo a golpes, lo que parec�a
ser la intenci�n de este salvaje. Big Joe hab�a notado su presencia, y le sonri� con aire
triunfador mientras redoblada su ataque. Suze sac� el revolver que ten�a y empez� a apuntarle a
Big Joe. Este respondi� atrapando a Mark por la espalda, coloc�ndolo como escudo, y sacando su
cuchillo, con el que rode� el cuello de su derrotado adversario.

\u201cSolt� el arma o lo mato\u201d, amenaz� Big Joe.

Suze lo segu�a apuntando, su interior revolvi�ndose con odio, mientras se debat�a en el rumbo a
seguir. Joe reafirm� la amenaza, apretando a�n m�s el cuello en el cogote de Mark. Suze not� que
este no parec�a tener ninguna fuerza para defenderse ni liberarse. O le encajaba un tiro perfecto
en la nuca a Joe, en lo que no pod�a confiar, o este matar�a a Mark sin piedad. A Suze no le
qued� otra que bajar su arma, para salvar nuevamente a Mark. Baj� el revolver y lo lanz� al
suelo.

\u201cAhora soltalo hijo de puta!\u201d, dijo Suze en tono firme.

\u201cC�mo no!\u201d, dijo Big Joe. Y dirigi�ndose a Mark \u201cnecesit�s que tu minita ande peleando tus
batallas. Qu� mariquita, perdedor!\u201d, y de inmediato le atraves� el cuello con el filo, y lo solt�
y este empez� a desplomarse.

\u201cNoooo!\u201d grito ella, lanz�ndose hacia el agonizante Mark.

Big Joe tom� el arma que Suze hab�a lanzado. La observ� mientras esta lloraba tendida sobre Mark.

\u201cBueno, al fin solos\u201d, dijo Big Joe con un pretendido tono seductor.

Suze acarici� tiernamente a Mark una vez m�s y se incorpor�, enfrentando a Big Joe. Contempl� la
masa de m�sculos que ten�a frente a ella. El cuerpo gigante del criminal le sacaba unos buenos 30
cent�metros. Su masa era tres veces o m�s la del cuerpo de ella.

Suze hab�a quedado completamente desarmada, mientras que el gigante que hab�a destrozado a golpes
a su amado estaba frente a ella con un arma. La situaci�n era verdaderamente desesperante. Se
mezclaban en Suze el dolor por Mark y el terror ante la situaci�n sin salida en la que, a pesar
de su persistencia durante toda esta noche, no hab�a logrado evitar caer.

\u201cDisfrut� cada instante de masacrar a tu noviecito, y ahora te voy a disfrutar a vos bomb�n\u201d, le
dijo Joe, gesticulando groseramente.

Esto fue suficiente. Suze sinti� como le herv�a la sangre. Joe vio c�mo su expresi�n de dolor y
confusi�n se transformaba en una de pura furia. Si las miradas mataran, la de Suze lo habr�a
masacrado. A pesar de su posici�n ventajosa, Joe sinti� por un segundo algo parecido al temor.
Pero no le dio cabida y comenz� a acercarse a Suze listo para golpearla en la cara.

Ella fue m�s r�pida. Cuando Joe estaba a punto de conectar su golpe, se contorsion� y estir� su
pierna derecha, lanz�ndola desde atr�s hacia adelante por encima de su cuerpo, en una patada de
escorpi�n. Este h�bil movimiento tom� a Joe completamente por sorpresa. El golpe, mucho m�s
fuerte de lo que habr�a esperado de su peque�a adversaria, conect� perfectamente en su quijada.
Sin detenerse m�s que una fracci�n de segundo para reacomodarse, Suze continu� con una patada
giratoria, que golpe� a Joe en el costado de su cara. La fuerza del golpe hizo a Joe retroceder
un metro, y el arma cay� al suelo. Suze pens� en intentar agarrarla, pero el avance de Joe la
hizo desistir por el momento.

El criminal gru�� con furia. \u201cMaldita puta! Te voy a ense�ar!\u201d, exclam�. Suze hizo un salto
mortal hacia atr�s que la puso a suficiente distancia para que Joe no pudiera concretar sus
amenazas. Este avanz� hecho una furia hacia donde ella estaba, y esta vez ella hizo una serie de
volteretas hacia adelante y hacia el costado, que volvieron a alejarla del criminal. Tan r�pido
lo hizo que pas� casi por al lado sin que Joe atinara a reaccionar, y ya estaba detr�s de �l
enfrent�ndolo sin que este hubiera llegado a darse vuelta. Cuando volte� Suze lo recibi� con una
patada alta, en el costado de la cara. Y nuevamente se alejo con una serie de saltos hacia atr�s.
Joe se hab�a quedado estupefacto. Le parec�a ins�lito que esta mujer se le estuviera escabullendo
con tanta habilidad, y que adem�s hubiera tenido el tup� de conectarle un par de patadas. De las
que, adem�s, deb�a reconocer que ciertamente hab�a sentido el impacto. El peque�o cuerpo de esta
chica era sorpresivamente poderoso.

Suze estaba igual de sorprendida. Sent�a v�rtigo ante la temeridad que estaba desplegando. Hab�a
tenido suerte en las primeras escaramuza, pero, �c�mo continuar as�? No ten�a idea de c�mo iba a
hacer para evitar que esta bestia la destrozara. Pero Suze no se iba a dejar paralizar por esto.
Aunque su adversario tuviera todas las de ganar, de ning�n modo se la iba a hacer f�cil. El odio
hacia el tipo que la hab�a violado y matado a Mark, le hab�a redoblando la determinaci�n que
hab�a mostrado durante toda esta noche salvaje. Bien alerta, se prepar� para esquivar otro ataque
de Joe.

Joe ensay� esta vez la t�ctica de aproximarse m�s lentamente, ir rodeando y arrinconando a su
presa. Iba avanzando y amagando golpes, pero sin concretar ninguno, y su avanzada obligaba a Suze
a retroceder. Cuando la ten�a casi contra una pared, decidi� enga�arla amagando una trompada con
la izquierda, para golpear con la derecha. Pero Suze vio venir la maniobra. Lo dej� amagar y,
cuando se predispon�a a lanzar su derecha, con la velocidad de un rayo Suze gir� a su derecha. El
ataque de Joe s�lo pudo golpear al aire, y lo dej� completamente descubierto para el
contra-ataque de Suze. Con la velocidad de un rayo, su derecha conect� un gancho que le dio en la
pera, y una fracci�n de segundo despu�s su izquierda peg� en el pecho de Big Joe. Los golpes
apenas sacudieron la musculosa corpulencia de su adversario (aunque nuevamente ac� tambi�n
experiment� con sorpresa que la fuerza de los golpes de Suze era mayor que la que podr�a haber
esperado), pero la humillaci�n de que ella hubiera conectado cinco golpes y no le hubiera
permitido golpearla ni una vez lo sac� completamente de las casillas.

Joe se prepar� para contraatacar pero cuando iba a hacerlo Suze estaba nuevamente lejos. El
intento de acorralarla hab�a fracaso completamente. A la distancia, Suze lo mir� desafiante, con
unos ojos helados, y adopt� una posici�n de combate, mientras su mano le hizo adem�n de que se
acercara.

Por supuesto, Joe no necesitaba ninguna convocatoria. Apretando sus pu�os y rugiendo en un af�n
de intimidarla que no tuvo �xito, se lanz� sobre Suze hecho una furia. No pod�a comprender que
esta pendeja se atreviera a desafiarlo. Parece que no hab�a registrado la manera apabullante en
la que hab�a arrasado con Mark, no una sino dos veces. �Acaso se cre�a que por ser una mujer le
iba a tener alg�n tipo de contemplaci�n? Para nada, la iba a moler a golpes y despu�s volver�a a
poseerla, como la noche anterior, antes de matarla.

Mientras pensaba todo esto Big Joe lanzaba un ataque implacable. S�lo la mitad de la energ�a que
estaba poniendo habr�a bastado para enviar al hospital al m�s temerario adversario. Y sin
embargo...� la bella y agil f�mina que ten�a frente a �l estaba haciendo frente a su avanzada.
Esquivando con una velocidad sorprendente sus ataques. Y, muy de vez en cuando, respondiendo con
alg�n contraaque. Suze no estaba dispuesta a dejar que esta bestia se saliera con la suya. Quer�a
revancha. Este criminal pagar�a por haberse abusado de ella y por Mark. Quer�a revancha y la iba
a conseguir. Si no quedaba otra alternativa, la obtendr�a ella con sus pu�os. Con sus pu�os y sus
pies, por supuesto, respaldados por la fuerza imbatible de esas piernas de gimnasta. La furia que
le hac�a hervir la sangre, lejos de haberla enceguecido, le hab�a otorgado una formidable
concentraci�n en el objetivo de resistir a Big Joe. Y no s�lo de resistirlo, no... de destruirlo!
Con en desenvolvimiento del combate se le hab�a ido borrando cualquier rastro de temor. Con una
formidable capacidad de para evaluar la situaci�n, hab�a sopesado sus fortalezas, y las
debilidades de su adversario. Bastaron unas peque�as escaramuzas para que Suze comprendiera que,
a pesar de la gran habilidad mostrada por Joe en sus peleas con Mark, ella pod�a ser mucho m�s
r�pida y eludir sus ataques con facilidad.� Si aprovechaba esta ventaja para obligar a esta
bestia a perseguirla sin �xito, no pasar�a mucho tiempo para que empezara a cansarse y viera
reducida su capacidad de ataque. Tambi�n, comprendi� r�pidamente que el poder de sus piernas,
bien utilizado, pod�a da�ar severamente a su adversario. Pod�a hacerle frente a este gigante
musculoso. Mejor dicho, pod�a molerlo a palos hasta matarlo. A medida que alcanzaba esta
comprensi�n, cualquier vestigio de miedo era reemplazado por una comprensi�n de su plena
superioridad. Comprensi�n que ella misma recib�a con incredulidad, a medida que el �xito de esta
estrategia que estaba trazando intuitivamente se iba comprobando.

Big Joe, empezaba a impacientarse cada vez m�s. Sus grandes habilidades se hab�an probado f�tiles
ante esta adversaria. Las maniobras que hab�a ensayado para enga�arla fueron todas desmontadas.
El resultado es que no hab�a podido conectar un s�lo golpe, mientras que todos los intercambios
terminaron con al menos una patada o trompada de ella encontrando su blanco, y muchas veces dos o
tres. Ning�n golpe individualmente le hab�a hecho gran da�o, aunque empezaba a sentir dolor en
varias partes del cuerpo. Pero claramente indicaban que el resultado provisional del combate no
lo favorec�a. Su cara reflejaba confusi�n, y Suze decidi� meter el dedo en la llaga para
desconcentrarlo a�n m�s.

\u201c�Esta pobre chica te est� haciendo da�o? Ay pobre grandul�n\u201d, exclam�, poniendo sus manos en la
cintura en pose desafiante. Como ella esperaba, Joe se enardeci� y reinici� la ofensiva a un
ritmo mayor. Pero sin estrategia. Lanzaba golpes ac� y all� esperando conectar alguno. Esperaba
que lanzar m�s golpes mejorara la probabilidad de conectar alguno. Pero la torpeza de sus
movimientos le rest� a�n m�s precisi�n, por lo cual Suze continu� esquivando sus ataques sin
dificultad, aunque se vio obligada a moverse r�pido. Aunque Joe se estaba dejando m�s expuesto,
no intent� atacarlo por un rato, limit�ndose a bailar para esquivar los golpes mientras dejaba
que se cansara. Se mov�an por toda la sala. La escena era claramente bizarra: un fortach�n
lanzando trompadas y patadas a un ritmo fren�tico, mientras una chica esbelta, que a su lado era
raqu�tica, esquivando los ataques movi�ndose de ac� para all�. Cualquiera que hubiera empezado a
observar la escena en ese momento habr�a sentido p�nico por la mujer, ya que el gesto de aquel
monstruo era el de alguien que se dispon�a a pulverizar a su adversario. Sin embargo, nuestro
hipot�tico observador, habr�a notado r�pidamente algo muy extra�o. A�n retrocediendo al comp�s
del ataque feroz de aquel hombre, ella no parec�a ni m�nimamente sobresaltada. Todo lo contrario.
su cara exhib�a una brillante sonrisa. No era para menos, ya que a pesar de todo el salvajismo
que le intentaba imprimir a su ataque, ella lograba eludir todos los golpes. Y, aunque los
ataques eran completamente unidireccionales, esto parec�a ser, al menos en parte, una decisi�n de
ella. Su sonrisa remarcaba a Joe la impotencia de su ataque.

\u201cCuando quieras arrancamos en serio. Avisame\u201d, provoc� Suze para remarcar lo poco intimidatorio
que estaba result�ndole Joe. Ella sent�a c�mo corr�a la adrenalina por su cuerpo. El aguante que
estaba haciendo a los ataques de este gigante la llenaba de excitaci�n. Aquel que hab�a arrasado
como una aplanadora con su compa�ero, un reputado campe�n de kickboxing, y seguramente con muchos
otros antes que �l, se mostraba incapaz de poner un dedo encima de ella. Mientas que ella hab�a
conectado una buena cantidad de golpes.

Sin embargo, el �xito le cre� un exceso de confianza y la llev� a bajar la guardia. Despu�s de
esquivar una patada de Big Joe, inici� un salto hacia atr�s. Su cara qued� un instante
desprotegida, justo cuando Joe le lanzaba un gancho derecho. Este conect� en su cara con pleno
impacto. Aunque Big Joe hab�a perdido energ�aa causa de los sucesivos fracasos que tuvo, el golpe
la dej� grogui. Joe sac� provecho de su ventaja y conect� una segunda trompada en su cada, y una
patada en el est�mago que le sac� el aire y la dej� de rodillas. Haciendo el mayor esfuerzo para
reponerse y salir de la linea de fuego, Suze gate� alej�ndose de Joe, que volvi� a patearla, en
la espalda. Suze vol� dos metros, y cay� de espaldas.

\u201cTe pensabas que ibas a evadirme indefinidamente! Te equivocaste! Ahora vas a concerme
verdaderamente\u201d, rugi� Joe, mientras levantaba sus brazos y trababa sus biceps. Finalmente,
sent�a que su superioridad hab�a quedado reafirmada. Sab�a que hab�a mucho de suerte en el golpe
que hab�a cambiado el panorama, concedi�ndole ventaja. Ning�n c�lculo hab�a detr�s; tan s�lo una
vez ella fue un poco m�s lenta, y uno de los tantos golpes lanzados al tun tun encontr� un
blanco. Pero no importaba, la mina que hab�a tenido la audacia de burlarse de �l estaba en el
piso, casi inconsciente, y pr�xima a recibir la paliza de su vida, y de su muerte. Ya ni siquiera
pensaba en gozar con ella. Quer�a r�pidamente aniquilarla, con sus pu�os.

Se acerc� a ella con los pu�os cerrados, listo para atacar a lo que ahora iba a ser, finalmente,
un blanco inm�vil. O eso cre�a Joe. Pero se enga�aba. Cuando estaba casi sobre Suze, levantando
una pierna para pisotearla en el suelo, Suze se incorpor� con una velocidad sorprendente. Parec�a
como si los golpes brutales de Joe no le hubieran dejado ninguna secuela. Tomando fuerza desde el
suelo se lanz� al aire, de espaldas a Joe, y conect� desde el aire una patada hacia atr�s que le
dio en el medio de la cara. Joe estaba completamente desprotegido, creyendo que estaba a punto de
a avanzar sobre una presa semi-insonsciente, y su patada conect� de lleno y con toda la fuerza
que Suze hab�a mostrado.

Asombroso. As� le resultaba a Joe. Y tambi�n a Suze. La seguidilla de golpes que conect� Big Joe
habr�a bastado para poner a cualquiera en el hospital. Y sin embargo, esta chica no s�lo segu�a
en pelea. Acaba de responder con una fuerte patada. No le hab�a resultado nada sencillo. Tuvo que
batallar para no caer en la inconsciencia. La idea de que su vida estaba en juego, pero sobre
todo el recuerdo de la violencia gratuita que Joe hab�a descargado sobre ella y sobre Mark, le
dieron la fuerza para no caer. La rabia volvi� con todo con ese recuerdo, y le dio la energ�a
para estar alerta mientras lo sent�a acercarse. Dej� que pensara que estaba inconsciente y, en el
momento justo, se lanz� al aire para tomarlo por sorpresa.

Joe qued� sacudido por el impacto del golpe. Suze no se dej� estar. Le lanz� a Joe una serie de
patadas altas, balance�ndose sobre su pierna izquierda mientras pateaba con la derecha.�� Mantuvo
el ataque por un tiempo que a Joe le result� interminable. Diez, doce patadas conectaron una tras
otra, sacudiendo la cabeza de Big Joe. Cuando termin�, era Joe el que estaba groggi,
bambole�ndose mientras su cuerpo parec�a pesarle. Le sal�a sangre de la nariz y la boca.

Joe, moralmente golpeado y debilitado por la seguidilla de patadas, trat� de sacudirse la resaca
y volvi� a la carga. Apostaba a un nuevo golpe que cambiara su suerte. Esta confianza contradec�a
la evidencia de lo que acababa de ocurrirle. Su golpe de suerte se hab�a evaporado. Aunque
conect� una seguidilla de duros golpes, estos no alcanzaron para asegurarle su dominio sobre un
rival -presuntamente- m�s d�bil. Lo que es peor, esta r�pidamente se recuper� y contraatac�,
poni�ndolo, metaf�ricamente, contra las cuerdas. Y lo que es incluso peor, no hab�a indicios de
un azaroso golpe de suerte, sino de estrategia, determinaci�n y precisi�n en la respuesta de
Suze. Tozudamente, Bi Joe parec�a a negarse a sacar todas las conclusiones del caso. Su fuerza
bruta terminar�a haciendo la diferencia.

\u201cParece que sos vos el que me vas a conocer a m�, papi\u201d, le espet� Suze mientras ahora era ella
quien posaba sando m�sculos, mostrando unos biceps poderosos que Joe no habr�a adivinado. Pudo
ver en su cara que esto pon�a todav�a m�s dudas en el ya atribulado �nimo de su adversario. Le
sonri� con superioridad y nuevamente, le hizo con la derecha un gesto de que se acercara,
mientras manten�a la mano izquierda en su cintura. Mientras Joe se acercaba, volvi� a lucir su
b�cep derecho, manteniendo la izquierda en la cintura y tambien trabando m�sculo, en una pose de
amazona que podr�a haber sido tapa de cualquier revista.

Nuevamente, Joe se lanz� al ataque. Le lanz� todo lo que ten�a a un ritmo desesperado. \u201cEst�pida!
Me acabo de cargar al campe�n de kickboxing y vos te pens�s que me vas a ganar!\u201d, exclam�
mientras cargaba sobre ella. Vio la mirada de fuego que de dedicaba, y recibi� su contraataque.
Para sorpresa de Joe, a diferencia de todo el desarrollo previo, Suze no bail� por la sala
esquivando sus golpes. Se plant� frente a �l y empez� a intercambiar golpes cara a cara. �l no lo
sab�a, pero cuando se levant� del suelo, Suze tom� la determinaci�n de que Joe no volver�a a
conectarle otro golpe. Tambi�n decidi� que a partir de ese momento no ser�a ella, sino �l, quien
estar�a a la defensiva. Se inici� un feroz intercambio desigual, entre el adonis y la gismnasta,
entre la bestia y la bella. Dos rivales de niveles� completamente diferentes. En este intercambio
se puso en evidencia finalmente de qu� madera estaban hechos cada uno. Y, para sorpresa de Big
Joe, �fue �l quien result� completamente superado! Sus golpes no ganaron en precisi�n. A�n firme
en el lugar, Suze esquivaba sus ataques con facilidad. Era poco el esfuerzo que le requer�a
moverse para esquivar los golpes de un Big Joe severamente enlentecido, y se lo hac�a notar
burl�ndose cada vez que pod�a. Tambi�n bloqueaba varios de los golpes que Joe lanzaba. El
desarrollo de la pelea le hab�a restado fuerza, y a pesar de la formidable diferencia de tama�os
la fuerza de Suze le permit�a bloquear sus ataques. Ella, por otro lado, no hab�a perdido ni un
�pice de velocidad ni fuerza. Por el contrario, la adrenalina la volv�a cada v�z m�s feroz. Por
cada golpe que �l erraba ella lanzaba tres, y, a diferencia de �l, lograba conectar todos. Cada
trompada o patada de Suze conectaba como si sus pu�os y pies fueran de piedra. La confianza de
Big Joe en su fuerza bruta estaba, por primera vez en su vida, siendo cuestionada. Lo que era m�s
humillante es que lo estaba haciendo una chica de un tercio de su tama�o. Y no parec�a haber
manera de cambiar el destino de derrota.

Suze estaba exultante, viendo c�mo se acercaba el momento de la victoria sobre su adversario. Su
coraz�n se aceleraba saboreando con anticipaci�n el resultado. Pero, alerta, evit� caer
nuevamente en el error de confiarse el exceso. Se manten�a alerta. Sobre todo, se manten�a sobre
su presa sin piedad, para no darle chance de montar cualquier ataque.

Paulatinamente fue dejando de intentar cualquier contraaatque, y se concentr� en intentar
bloquear los de ella. Pero eso no le permiti� reducir ni un poco el da�o que estaba recibiendo.
Suze parec�a tener cuatro brazos y cuatro piernas, y sus ataques venir a la vez de todas las
direcciones posibles. A esta altura ella era para �l una mancha borrosa que ven�a de todos lados.
Transcurrido lo que no pueden haber sido mucho m�s de diez minutos, casi no ofrec�a ninguna
resistencia. Era como una bolsa de box, destinada a recibir todos los golpes que con brutalidad
le lanzaba su victimaria.

Suze hizo una pausa para observar la destrucci�n que hab�a llevado a cabo. Todo el cuerpo de Joe
estaba atravesado de moretones, y manchado de su sangre.Los ojos en compota y parec�a haber
perdido un diente. Estaba consciente s�lo porque ella hab�a decidido extender al m�ximo su
sufrimiento. Lo que lo hac�a peor para �l, es que ambos sab�an que era as�, y que era ella quien
controlaba el desarrollo de los acontecimientos. El otrora temido Big Joe sent�a c�mo se hab�a
transformado en un juguete en manos de esta despiadada mujer. Ahora que los golpes de ella hab�an
dejado de mantenerlo en pie (s�, era su carga despiadada lo �nico que durante los �ltimos minutos
hab�a impedido que se desplomara) cay� de rodillas. La cabeza le colg� a un costado. Ten�a los
ojos llorosos de los golpes y la vista borrosa.

Como un felino que se abalanza sobre su presa, y relami�ndose en un gesto sexy y cruel, Suze se
lanz� sobre Joe para retomar su trabajo. Al verla de repente frente a �l, este experiment� de
repente una sensaci�n que no recordaba haber sentido: miedo. Miedo de una mujer de las que
normalmente se deber�an haber tendido sumisamente a sus pies. Ver esto increment� la exitaci�n de
Suze.

Con ambas manos rodeo la cabeza de Joe, lo oblig� a mirarla fijamente, para poder contemplar todo
el p�nico en su mirada y reafirmar su superioridad. Luego empuj� su cabeza para abajo mientras
levantaba con fuerza su rodilla derecha. El impacto fue brutal, y levant� por los aires el cuerpo
de Big Joe, que vol� varios metros y aterriz� en el suelo casi inconsciente.

Al caer, Big Joe sinti� algo met�lico y fr�o debajo de �l. Era el arma que hab�a escapado de sus
manos cuando Suze lo pate�. Con la mayor velocidad y disimulo que pod�a tener dadas las
circunstancias, se aferr� al arma calculando la oportunidad para usarla.

\u201cLevantate, que todav�a no terminamos hijo de puta!\u201d, le orden� Suze. Big Joe se levant�
lentamente, d�ndole la espalda, mientras ella calibraba c�mo continuar�a su tortura. Joe, a punto
de terminar de pararse levant� su brazo derecho y le apunt�. Reci�n ah� Suze pudo ver el arma.
Reaccion� r�pidamente, y cuando el disparo sali� ella estaba ya fuera de rango. De un salto hab�a
llegado al lado de Joe, que todav�a ten�a el brazo derecho estirado hacia donde hab�a apuntado.
Atin� a girar el arma hacia Suze, pero ella le agarr� el brazo. Empez� una prueba de fuerzas
entre ambos para controlar el arma. Ambos forcejearon con ambos brazos. Big Joe intent� hacer
pesar su fueza bruta, haciendo caer el peso de su cuerpo sobre Suze para obligarla a soltar el
arma. Pero, despu�s de la paliza recibida, su fuerza bruta no era lo que normalmente era. Suze
agarr� firmemente las manos de Joe, a pesar de que la superioridad en altura de este la obligaba
a una posici�n dif�cil para aplicar fuerza, y se qued� bien plantada en el suelo, sin que hubiera
forma de que el bruto la empujara. Al cabo de un minuto, Big Joe sinti� como su fuerza empezaba a
flaquear. La presi�n de la peque�a Suze, en cambio, no aflojaba en lo m�s m�nimo. Retener el arma
en sus manos se le estaba haciendo cada vez m�s dif�cil. Hizo un herc�leo esfuerzo, trato de
concentrar su energ�a en un tir�n con el cu�l esperaba desequilibrar a su adversaria. Ella sinti�
venir una gran fuerza repentina por parte del gigante, y reafirm� su agarre sobre las manos del
criminal. Todo el impulso logrado por Joe con esta �ltima heroica concentraci�n de fuerzas se
disipo sin mayor efecto sobre Suze. Nuevamente su cara mostr� una expresi�n de desmoralizaci�n, y
fue respondida con una resplandeciente sonrisa por parte de Suze. \u201cParece que esos brazotes los
ten�s de adorno. No son adversario para mi fuerza de gimnasta!\u201d, le espet�. Lo hab�a vencido en
la pelea, y ahora lo venc�a en una prueba de fuerzas. Claramente pon�a en evidencia una
superioridad f�sica en todos los terrenos.

Suze comprendi� que era el momento de avanzar. Hasta el momento hab�a aplicado una fuerza
limitada, para dejar que Big Joe se desgastara, pero ahora la redobl�. Separ� las manos de �l,
permitiendo que retuviera el arma s�lo con una, que a la vez fue agarrada firmemente por la mano
de ella. Lo mismo hizo con la otra, y comenz� a aplicar toda su fuerza, empujando sus manos hacia
atr�s. Big Joe sinti� un dolor de agon�a que recorr�a sus brazos. No pudo resistir la avasallante
fuerza que Suze aplicaba sobre sus brazos. Sus brazos enormes y musculosos no pudieron contra la
fuerza de los femeninos m�sculos de la bailarina y gimnasta. El gigante se fue doblando,
derrotado nuevamente por su mucho m�s peque�a adversaria. Cuando lo tuvo de rodillas, Suze le
solt� a Joe la mano izquierda y le termin� de arrebatar de un tir�n el arma que ahora colgaba
flojamente de su mano derecha. Al soltarlo se desplom� nuevamente sobre el suelo.

Este era el final para Joe. Estaba preparado para el tiro que lo ultimara. Cerr� los ojos en
espera del mismo. Pero no ocurri�. Vio como Suze se guardaba el arma en la cartuchera que ten�a
vac�a al costado de su pierna, y se cruzaba de brazos observ�ndolo. \u201c�Te pensabas que esto se iba
a acabar tan f�cil? No nene, te voy a matar, pero en lucha cuerpo a cuerpo. Va a ser mi
superioridad f�sica la que te va a destruir\u201d. Big Joe se empez� a incoporar, con esfuerzo,
mir�ndola fijamente. \u201cPuta... vas a pagar por todo esto, vas a ver... No matarme con esa arma
ser� tu error fatal\u201d, bravucone�. \u201cAy, �callate de una vez pelotudo!\u201d, le orden� Suze. Avanz�
hacia a Joe -en cuya cara se volvi� a dibujar el miedo- y lo empuj� con ambas manos. A pesar de
su tama�o, apenas un empuj�n bast� para ponerlo contra la pared que estaba a un metro de �l.
Entonces Suze levant� su pierna derecha y le puso el pie sobre el cuello, aplicando fuerte
presi�n. \u201cEntendelo de una vez, idiota. Ya hace rato est�s derrotado, no ten�s chance. Esto s�lo
sigue porque as� lo quiero yo\u201d. Entre el ahogo que le creaba la prisi�n de su pierna, Joe
contest� \u201cYa vas a ver... un s�lo golpe con estos brazos y cambia la cosa... pura suerte\u201d.
Intentaba convencerse a s� mismo de lo que dec�a, aunque toda la evidencia era contraria.

\u201c�Ah si?\u201d, le dijo Suze, mientras reforzaba la presi�n sobre el cuello de Joe, ahog�ndolo. Se le
ilumin� una mirada cruel mientras observaba a Joe intentando futilmente liberarse de la prisi�n
de su pie. De repente lo solt�, y Joe casi cae nuevamente al piso. Inspir� con desesperaci�n para
oxigenarse. \u201cA ver, machito. Parece que todav�a no ca�ste en la cuenta de que te re cagu� a
palos, te super� en fuerza, y voy a matarte. Para que entiendas del todo te voy a dar una �ltima
oportunidad, �nica. Cinco golpes sin defenderme ni contraatacar. Dale, intentalo\u201d. Mientras dec�a
esto �ltimo Suze se palme� el costado de la cara, como invit�ndolo a golpearla all�.

Joe le clav� una mirada cargada de odio. Quer�a cagar a trompadas a esta mina que lo trataba de
forma tan sobradora. A �l, que hab�a destruido en combate sin piedad a cientos de adversarios,
que ten�a a�os de experiencia en combate. Le iba a borrar el gesto de superioridad de su cara.
Cerr� sus� pu�os juntando bronca, y le lanz� un gancho a la cara. Suze lo vio venir y,
calmadamente, se limit� a doblarse hacia atr�s. \u201cUno\u201d, cont� ella.

Ahora Joe intent� una patada giratoria. Suze salt� hacia atr�s y esquiv� el ataque. \u201cDos\u201d. Joe
avanz� sobre ella e intent� una combinaci�n de izquierda derecha a su cara, sin mayor �xito.
\u201cTres y cuatro\u201d. \u201cMaldita!\u201d, exclam� Joe para sus adentros. Con toda la fuerza que conservaba le
lanz� un golpe al est�mago. Suze lo vio venir y decidi� no esquivarlo, tensando sus abdominales
para recibir el golpe. A�n debilitado por el paliza, Joe pudo imprimir al golpe una fueza
considerable. Pero ella pudo absorber el impacto sin dificultad en la pared de hierro que
conformaban sus abdominales. Ni se movi�. Joe, en cambio, sinti� en su pu�o verdadero dolor.
�Increible! Nunca hab�a sentido nada semejante en una pelea. La mir�, esta vez s� verdaderamente
estupefacto. Por si cab�a alguna duda, esta era a�n otra prueba m�s de que esta mujer estaba
completamente en otro nivel. No hab�a forma de salir con vida de esa habitaci�n. \u201cCinco\u201d, dijo
Suze, mientras continuaba tensando sus abdominales, y levantaba ambos brazos para lucir tambi�n
los biceps. Big Joe se quebr� completamente, fue ganado por el p�nico. \u201cNooo!... por favor...
no!\u201d, exclamaba. Suze, con una mirada que no mostraba ni un dejo de piedad, se limit� a decir:
\u201cMi turno\u201d. Abri� fuego con una patada alta giratoria, y otra, y una tercera, y una cuarta. Cada
patada lo empujaba a Joe un metro para atr�s, agit�ndose toda su musculatura ante cada impacto.
Cuando termin� hizo un salto hacia adelante, y puso un pie a cada lado de su cabeza,
aprision�ndola. Haciendo fuerza hacia atr�s con todo su cuerpo tir� sobre la cabeza de Joe y lo
levant� por encima de ella y lo solto. Joe se desplom� sobre su espalda, semi inconsciente. Suze
lo agarr� de su brazo izquierdo y lo oblig� a levantarse.

\u201cBueno, ahora s�, vas a morir\u201d, le dijo mir�ndolo fr�amente. \u201cC�mo hacerlo?\u201d se pregunt� en voz
alta, ensimismada. Casi parec�a ingorar completamente al hombre que se debat�a entre la
consciencia y la inconsciencia al lado suyo. Observ� una barra que atravesaba el techo a tres
metros de altura m�s o menos. \u201cAh, ya se!\u201d exclam�. Realiz� una pirueta de lado que la elev� a la
altura de la cabeza de Joe, y aterriz� con una de sus femeninas piernas a cada lado de sus
hombros, de frente a �l. Se agarr� con una mano de la barra, y con la otra agarr� a Joe de los
pelos y tir� hacia atr�s para que levantara la cabeza y la mirada. \u201cAs� que quer�as volver a
estar entre mis piernas. Bueno, deseo cumplido\u201d. Trabando sus tobillos, encerr� la cabeza de Joe
en la prisi�n de carne de sus piernas. Con ambas manos se agarr� de la barra. Aunque Joe
intentaba desestabilizarla con toda la fuerza bruta de su masa corporal, la fuerza de su agarre
le impidi� moverla siquiera un mil�metro. Para barrer con cualquier resistencia intensific� la
fuerza aplicada sobre su cabeza, cortando su circulaci�n y su respiraci�n. Suze pod�a sentir c�mo
la vida se le iba escurriendo. Decidi� sacudirle en un instante el soplo de vida que conservaba.
Haciendo un �ltimo despliegue se su fuerza descomunal, tens� sus brazos y levant� el cuerpo
agonizante de Joe, separ�ndolo del suelo. Su cuerpo se empez� a convulsionar, sus piernas
movi�ndose de forma desesperada ante el bloqueo de aire. Pero en unos pocos segundos estaba casi
inm�vil. Suze volvi� a dejar que el cuerpo de Joe se posara en el suelo, y agarr�ndose firme de
la barra gir� su cadera 180 grados. Sinti� como el cuello de Joe se quebraba entre sus piernas, y
lo liber�. El cad�ver del criminal se desplom�. Suze aterriz� sobre �l, y levant� ambos pu�os en
expresi�n de triunfo, sacando biceps.

La inund� una sensaci�n de profundo alivio. Despu�s de una noche de pesadilla, hab�a logrado
derrotar a decenas de hombres. El ej�rcito de maleantes que la aprision�, la abus� y luego la
persigui� de forma implacable, hab�a sido aniquilado por ella. Se transform� de presa en
cazadora. Al mismo tiempo que el alivio, la recorr�a el dolor por no haber podido salvar a su
amado, Mark. Se tendi� sobre su cuerpo, y ahora llor� lo que no hab�a podido llorar antes.

Suze hab�a probado esta noche el poder de una mujer empujada a llegar al l�mite. Ya no m�s
volver�a a permitirse ser un v�ctima. De ahora en m�s, ser�a la Cazadora, y barrer�a sin piedad
con los maleantes all� donde tuvieran la desgracia de tomarse con ella.