O.M.W. LA CONTINUACIÓN DEL TORNEO. Por HORUS. Terminada la indiscutible victoria de Mercedes, se procedió a un nuevo encuentro, el de Lola contra Arturo. Entro Lola al escenario primero, se pudo ver a una mujer de cuarenta años de edad, pero que, por su físico y contextura aparentaba unos quince años menos. Ella media un metro sesenta de estatura y ciento ochenta libras de peso corporal. Poseía la espalda y dorsales más grandes de todo el gimnasio así como unos brazos descomunales que hacia gala de su fuerza. Sus piernas eran fuertes pero dentro de lo normal así como sus pechos y caderas eran normales. Vestía con un short blanco, camiseta celeste con blanco y tenis blancos. Al hacer su aparición y a modo de presentación, comenzó a flexionar sus músculos delante de todas las espectadoras, que pudieron ver la amplitud de sus dorsales los cuales hacían una uve profunda así como los músculos de la espalda que se agrandaban a cada maniobra de flexión en forma asombrosa. Sus fuertes brazos que median veinticuatro pulgadas de circunferencia eran dos enormes bolas de músculos en sus bíceps, y combados triángulos de sus tríceps. Los antebrazos eran gruesos y llenos de músculo los cuales se marcaban con solo que ella bajara un poco sus muñecas. Terminada la demostración, se planto en medio del mat de lucha para esperar a su contrincante Arturo, quien media un metro ochenta y cinco de estatura y noventa y dos kilos de peso corporal. Era un fisiculturista de veinticinco años de edad próximo a ingresar a la categoría profesional, por lo que era un poco arrogante y lleno de soberbia. Su entrada fue algo chocante, toda vez que él creía que se enfrentaría a unas chicas indignas de su categoría y jamás podían compararse sus músculos con los de ellas, por lo que creía que era un insulto estar allí, pero como carecía de dinero y no tenía quien le ayudara en su patrocinio, fue que acepto pelear con alguna miembro del O.M.W a cambio de una buena suma. Él vestía una pantaloneta azul y camiseta negra de tirantes que decía "golds Gym" y las consabidas tenis. Al ingresar saludo con desdén a las presentes intercambiando frases irónicas con ellas y molestando a las que tenia cerca. Cuando le presentaron a su rival su actitud cambio por completo puesto que su antagonista era con mucho, más musculosa que él. E incluso, cuando procedió en forma altanera en flexionar su brazo derecho, donde se emergió un músculo de bíceps amplio y combado, era poco en comparación con el de Lola quien también flexiono su bíceps derecho a la par de el, con lo que el de ella eran mucho mayor, más grande y más fuerte que el suyo. Lola hizo una pose de espalda y con un gesto pidió que también lo hiciera él, con lo que se vio una notable diferencia. La espalda de Lola triplicaba a la de su joven oponente, lo mismo eran sus hombros y sus dorsales. Arturo se veía muy pequeño en relación con ella por lo que en forma prepotente, le dijo a Miss Wolf, que comenzaran de una vez y se dejara de poses ridículas. Miss Wolf, sonrió y le dijo que lo complacería por lo que dio inicio al encuentro. Arturo ingreso como si fuera una tromba, dando golpes con sus puños a diestra y siniestra, por lo que Lola procedió a moverse rápidamente para evitar los golpes locos de él. Con conocimientos básicos de boxeo, procedió a amagar con rapidez el ataque de su rival pero cansada de los insultos y malas palabras de Arturo, se paro en medio del mat para esperar un puñetazo de él con el objetivo de demostrarle que no le temía. Arturo mando un sonoro derechazo al menton de Lola quien no opuso resistencia. Para asombro de él, el golpe que dio con toda su fuerza, no hizo el menor impacto en la cara de su rival, no la movió, no le dejo marca ni le hizo el más mínimo daño. El cuello de Lola, por sus cotidianos ejercicios, era un cuello fuerte con gruesos músculos pero sin perder por ello su belleza femenina por lo que el golpe fue bien asimilado por éste gracias a las técnicas de control mental, endureció su quijada de manera que el impacto hiciera una acción mínima en su rostro. Sonriente, le hizo una señal de que le pegara en su fuerte estomago cuyos cuadritos musculares sobresalían en forma grande de su piel. Arturo envió un nuevo puñetazo a la zona abdominal y luego otros ocho mas sin que le hiciera el mayor efecto. El hombre apenas podía creer, que una mujer madura soportara sus golpes sin siquiera inquietarse por ello, con lo que la incredulidad se empezó a cambiar por el miedo. Lola, mostrándole la mejor sonrisa de su rostro, se le acerco, cerro sus puños y asesto un gancho rápido y efectivo al hígado de su oponente quien se doblo del impacto por el dolor, y antes de que se doblara en el piso, impacto un uppercut que lo hizo levantado como un metro y medio del piso para caer como a dos metros de donde había estado. Semi atontado por el impacto, y la forma brutal en que se cayo, trato de levantarse cuando sintió las manos de Lola encima quien agarro su camiseta con una mano y lo hizo levantado de una vez sin esfuerzo. El apenas podía tener conciencia de donde estaba por lo que trato de enviar un puñetazo nuevo a la humanidad de Lola, la cual evadió con facilidad para agarrarlo de la cintura, en un abrazo de oso, que lo hizo levantado unos diez centímetros del piso, esto por la baja estatura de la fémina, pero el abrazo fue brutal. Los dorsales de la mujer se combaron y todos los músculos de su espalda se marcaron creciéndose con fuerza de donde estaban. Los hombros de Lola se hincharon como dos bolas de boliche, y sus brazos se agrandaron para dar paso a la fuerza que le imprimía al agarre del cual Arturo sintió que rápidamente lo constreñía contra el bien formado cuerpo de Lola. Él trataba con toda su potencia de quitarse el apretón e incluso utilizaba sus pies para dar pataletas y sus brazos trataban de empujar la cara, hombros, torso y brazos de Lola, sin que se movieran de su sitio. Su idea del miedo comenzó a crecer, puesto que sabia que en cualquier momento se quebraría su espalda por lo que comenzó a suplicar que lo dejase, que se rendía por cuanto no podía resistir mas la fuerza de su oponente. Lola, seguía imperturbable con su abrazo de oso, pero sintiendo algo de compasión por él lo soltó, con lo que Arturo cayo al suelo frotándose la espalda por el dolor y apenas podía incorporarse. Ella lo dejo que se aliviara por unos minutos de los que aprovecho para burlarse de su joven rival quien practicaba el fisiculturismo pero no resistía la fuerza de ella por lo que lo consideraba un perdedor. Arturo se sintió herido por lo que se incorporo y trato de tacklear a su rival pero Lola no estaba para bromas ni para dar mas tiempo a su encuentro con Arturo, por lo que se ladeó para evadir la embestida y lo agarro nuevamente con sus fuertes brazos por la cintura para, sin esfuerzo alguno cogerlo por el cuello y por la entrepierna para levantarlo bien alto sobre su cabeza como si fuera una barra de ejercicio. El hombre sintió terror y humillación al ver como era utilizado por Lola para hacer press militar con su cuerpo elevándolo diez veces con facilidad. Luego, lo bajo para seguir aplicando el abrazo de oso, pero esta vez fue sin lastima de clase alguna. La extraordinaria fuerza de Lola procedió a liquidar el encuentro estrujando al joven quien luego de un fútiles intentos, no volvió a hacer mas resistencia con lo que comenzó a quebrarse su espalda en dos partes y cayo examine bajando los brazos. Lola lo soltó dejándole en el piso y saludo a sus compañeras haciendo nuevamente sus poses de fuerza, mientras el personal paramédico se llevaba a Arturo urgente al Hospital. Luego, Miss Wolf, anuncio que seguiría IRENE en el tercer turno. Ella era una cuarentona que, al igual que Miss Wolf, se había reprimido por largo tiempo, usando ropas holgadísimas con faldas largas, y daba la impresión de ser una matrona de edad madura. Fue Miss Wolf, quien la convencio de integrarse a su gimnasio para que procediera a mejorar su estima y físico. Era una mujer alta, media un metro noventa de estatura, con brazos y piernas largos, sumamente delgada por lo que, antes de iniciarse en el programa, pesaba ciento diez libras, siendo lo mas parecido a una anoréxica. A los pocos meses y dado su entusiasmo, ella cambia totalmente haciendo fuerte énfasis en fortalecer su físico y sus piernas, las cuales se engrosaron grandemente llegando a medir treinta y tres pulgadas de grosor y llenas de músculo. Sus brazos se desarrollaron fuertemente lo mismo que su cuerpo el cual se acentuó un cuerpo firme y sensual de mujer deportiva. Obviamente, su vestuario y estilo de vida también cambió. Se volvió una mujer fascinante, con prendas atrevidas que destacaban minifaldas, trajes escotados, pantalones ceñidos, y su estilo de vida era frecuente la noche en bares donde no eran pocos los jóvenes que mantenían sexo con ella sea por las buenas o por las malas. Para su encuentro, Irene, se vistió con una camiseta blanca sin leyendas de clase alguna y sin margas, que revelaba su bien formado torso así como un pequeño pantaloncito militar y una gorra que en su parte trasera emergía parte de su cabello recogido en una cola de caballo. El pantaloncito apenas podía verse dentro de la enormidad de sus muslos los cuales empequeñecían al mismo haciéndolo casi imperceptible a la vista de todos. Ella dio una muestra de sus piernas flexionándolas para que sus muslos se emergieran de ellas bien grandes y turgentes como también sus pantorrillas se crecieron grandes y bien formadas. Esperando a su rival y entro Cesar, un joven amante de los gimnasios, con fuertes músculos producto de su entrega al ejercicio pero era de baja estatura, media un metro sesenta y seis, vistiendo una camiseta que decía curiosamente "Lo pequeño es poderoso", así como una pantaloneta que le llegaba a las rodillas. A las presentes, como a Irene, le asombraron que le pusieran un contendiente tan pequeño a Irene, quien estaba acostumbrara a combatir con tipos de mas de un metro ochenta y cinco de estatura y con mas de doscientas libras de peso. Irene levanto sus cejas en señal de incredulidad y miro a su jefa, Miss Wolf, quien únicamente atina en guiñarle un ojo en señal de que aceptara y que tuviera en cuenta que no había rival pequeño. El muchacho entro al mat y saludo cortésmente a Miss Wolf, como también a su rival, con lo que a una señal de la referí se procedió al encuentro. Irene pronto descubrió que Cesar era un rival escurridizo y tedioso de manejar dado que tenia una fuerza y agilidad asombrosa para su tamaño. Al cabo de unos pocos minutos, Cesar la puso en el suelo y le aplico una llave de pie seguida de un Boston Crab, que dejo a la mujer presa del dolor y de la desesperación, con lo que hacia esfuerzos denodados para quitárselo siendo imposible por la agilidad de su oponente. Cesar la soltó, y procedió a aplicar un cierre de martillo con un medio Nelson que tenia el cuello de Irene doblado en dos, con lo que la amazona comenzó a desesperarse dado que su rival le estaba ganando con holgura y no podía con él. Trató de quebrar el agarre y Cesar respondía con otro pero cuidando de no darle oportunidad a las piernotas de Irene las cuales de agarrarlo desprevenido seria el final del combate, dado que el grosor y fuerza de sus muslos era demasiado no solo para él sino para cualquier mortal que tuviera la desgracia de caer en medio de ellos. El combate se estaba haciendo demasiado largo y las compañeras de Irene trataban de animarla para que respondiera a las tácticas de su rival, lo que tal apoyo hacia desesperar mas a Irene quien no veía como enfrentar a Cesar quien no la dejaba levantarse del piso con sus llaves y velocidad de reacción. Los agarres le causaban mucho dolor y humillación pero sobre todo, rabia al saber que gracias a la táctica de su rival, no podía utilizar lo mejor de su arsenal. Aprovechando un pequeño descuido de Cesar, Irene no perdono, por lo que procedió a hacer un giro de piernas que derribo a su oponente en el piso y procedió a levantarse para coger de los brazos a Cesar e inmovilizarlo en el suelo mientras sus piernas se enrollaban en su sección media para aplicarle una tijera en su estomago. Ella, furiosa procedió a apretar fuertemente con sus piernas y enormes muslos, mientras que sus fuertes brazos sostenían al hombre en el piso para no darle una oportunidad de poder contraatacar. Luego de unos minutos en los cuales casi quiebra sus costillas, lo soltó y se levanto del piso dejando a Cesar en el suelo retorciéndose del dolor boca arriba, por lo que ella volvió a la carga, sentándose detrás de la cabeza de Cesar, con lo que cogió la misma y la puso entre sus piernas como a diez centímetros arriba de sus rodillas donde estaba lo mas fuerte de sus enormes muslos. Para hacer más efectivo el agarre, agarro las manos de Cesar por las muñecas y las ato por detrás con sus fuertes manos para luego ponerlas en medio de sus enormes pantorrillas, que -a manera de cepo- procedieron a dejarlo esposado sin poder moverse. Teniendo todo bajo seguro, procedió a levantarse un poco el diminuto pantaloncito para enfatizar su sexo, y luego aflojo un poco sus piernas, las abrió y procedió a colocar la cabeza y cara de Cesar en lo más profundo de sus piernas, pegada a su sexo, y procedió a cerrar nuevamente las mismas sin dejar de mantener aprisionado a él con sus pantorrillas. Hecho lo anterior, se acomodo y procedió a apretar la cabeza de el entre sus piernas las cuales prácticamente se zamparon la misma con sus fuertes carnes dejándola invisible a los demás y con el pantaloncito prácticamente sin poderse notar. Ella comenzó a mover sus caderas para darse placer y por varios minutos apretó mas duro hasta que Cesar perdió el conocimiento. Al abrir sus monumentales piernas se pudo ver que la cabeza de Cesar estaba roja del impacto, con indicios de hacerse fracturado la quijada. Ella lo puso boca arriba en el suelo y se sentó a horcajadas en su cara mientras Miss Wolf hacia el inútil conteo de ley, dado que estaba mas que derrotado por las macizas piernas de su oponente. El gran sexo de Irene cubría toda la faz de Cesar y en cada conteo de Miss Wolf, ella procedía a girar sus caderas en el sentido de las manecillas del reloj con lo que se apretaba mas fuerte la cara contra su sexo. Al conteo de diez, se levanto y pidió un vaso de agua para poder volver a Cesar en si con lo que al tirarle volvió a respirar y lo levanto del piso para llevarlo a la enfermería donde lo enviaron de una vez al hospital. Tras unos breves minutos siguió el encuentro entre ROSA y LESTER. Rosa tenia unos cuarenta y nueve años de edad, y media un metro setenta y cinco de estatura. Su cuerpo era musculoso y turgente con fuertes brazos y piernas que eran producto del entrenamiento de pesas en el Gimnasio. Ella se destacaba de las demás por el tamaño de sus pechos, los cuales eran los más grandes de toda la organización, siendo los mismos dos perfectas y grandes pelotas erectas, con fuertes pezones. Ella media cuarenta y seis pulgadas de busto en talla JJJ, con lo que tenia unos senos grandes que necesitaban talladores especiales. Vestía un leotardo blanco de talle alto que revelaba un escote que permitía una vista espléndida de sus bustos. Por razones obvias se había especializado en lo que se denominaba "Breast Smother" o ahogamientos de busto, y eran no pocos los rivales que eran PUESTOS fuera de combate con sus fuertes pechos o ahogados por la firme carne de ellos. Lester por su parte, era un joven especializado en lucha libre y pesaba ciento cincuenta libras de peso, siendo un peso liviano en su categoría. Tenia en su haber varios campeonatos universitarios de lucha y era muy técnico. Media un metro setenta y cinco de estatura y su complexión era mediana. Vestía una camiseta y pantaloneta con tenis blancas. El encuentro dio inicio y ambas partes se enfrascaron en un combate cuerpo a cuerpo muy emocionante. Lester derribó a Rosa con una llave técnica y en el suelo aplico una llave de manos que la dejo aprisionada en el piso y la tenia dominada. Rosa trataba de quitarse el agarre pero era inútil, por lo que opto por levantarse del piso mientras soportaba el dolor que la llave de su oponente le hacia. Una vez parada y con gestos de dolor, se doblo y agarro la cabeza de Lester, para enrollarla en su fuerte brazo, con lo que se soltó y comenzó a apretar la misma con sus brazos para debilitar un poco al muchacho. Con una maniobra rápida, procedió a colocar la cabeza de Lester en su pecho izquierdo y la gran teta recibe a su victima la cual engulle entre sus grandes carnes. Lester hacia enormes esfuerzos por quitarse la gran almohada que tenia en su cara pero la fuerza de Rosa lo mantenía en su lugar, por lo que la cara de él se la engullía su busto mientras era sostenido por los fuertes brazos de ella. El muchacho comenzó a hacer fuerza en forma desesperada toda vez que se sentía asfixiado por la exuberante carne de su rival, logrando salir del agarre casi atontado por la falta de oxigeno y respirando grandes bocanadas de aire, pero nuevamente, Rosa lo cogió de un brazo y lo zancadillo para que cayeran al suelo donde Lester aprovecho para hacerle una llave que dejo a ella inmovilizada en el piso sin posibilidad de poder sacudirse toda vez que era con un cierre de mano y de piernas. Las espectadoras estaban un tanto ansiosas dado que la derrota de Rosa seria posible. Empero, ella comenzó a ponerse furiosa con su rival toda vez que no admitía ninguna derrota en su contra por lo que procedió a tomar medidas: Agarro a su rival de un brazo e hizo un resorteo con sus piernas con lo que levanto a Lester, de donde estaba, y con un rápido giro, lo volteo para ponerlo boca arriba en el suelo y colocarse ella encima de el. Una vez que estaba en esta posición, hizo una enredadera con sus piernas para sostener las piernas de Lester, e inmovilizarlo en el piso dejándole sin opción de moverse y en cada intento de Lester por libertarse procedía a aplicar una embestida de caderas que lo mantenía quieto donde estaba, el estrujamiento que las caderas hacían en la humanidad de su rival era potente y estremecían todo su cuerpo con lo que él se mantuvo quieto. Acto seguido, agarro sus muñecas con sus manos y las puso en el suelo arriba de su cabeza, de manera que sus enormes bustos quedaran a corta distancia de la cara de Lester con sus grandes pezones que se emergían de su leotardo apuntándole directamente a su cara, y él hacia movimientos desesperados para salir pero era fútiles ante la experiencia y fuerza de Rosa. Los pechos de Rosa quedaron casi pegados a la cara de Lester y por su tamaño obligaban a su dueña a arquear la espalda para dar cabida ellos y acomodar a su presa entre la enormidad de sus carnes. Rosa miraba sonriente a sus compañeras mientras meneaba sus tetotas rozándolas encima de la cara de su oponente quien se movía con cada vaivén de las glándulas de ella. Pasado un tiempo, tira sus pechos violentamente en la cara de su rival tapándola completamente con sus fuertes carnes se la comieron viva entre su escote. Aplico por unos minutos una fuerte sofocación a su antagonista reforzando su impacto con fuertes masajes de sus pechugas por toda la cara y luego, agarro con una mano las dos muñecas de él sosteniéndolas en el piso y con la otra mano, en forma lenta, sonriéndole a sus compañeras y a su yaciente rival fue bajándose hacia los lados, la parte superior de su leotardo, con lo que salieron de su encierro sus grandes pectorales con sus areolas rosadas y sus pezones erectos grandes y firmes que parecían dos melones inmensos que se colgaban de su cuerpo en forma firme como quisieran buscar a una victima que ahogar. Cuando tuvo libres los dos pechos, procedió a ponerlos nuevamente en la cara de su opositor golpeando la misma uno seguido del otro como si fueran guantes de box, con los pezones pegando en la cara, ojos y boca de Lester quien se volteaba como si le pegaran con puños y su cara quedo marcada de la ordalía que estaba pasado. Luego, cuando lo tenia semi-atontado por los golpes y en estado de conmoción, procedió a frotar sus pechugas en la cara de el, haciendo énfasis en sus pezones los que introdujo en la boca de Lester, quien se ahogaba por el enorme tamaño de ellos y que al meterse en su boca le llegaban hasta la campanilla. Luego dejo de golpearlo y descanso sus tetas en su cara para terminarlo a la vez que ambas por su inmenso tamaño y contextura, se desbordaban encima de la cara de Lester para aniquilar a su rival. Para el final ella se levanta un poco, cambio de posición y se puso en sentido inverso encima de Lester, colocando su sexo en su cara mientras ponía sus grandes pechos en el sexo de su competidor y se puso a descansar encima de su cuerpo con todo su peso, mientras Lester luchaba enormemente por no ser ahogado ahora por el sexo de Rosa, quien abrió un poco las piernas para que la vulva y sus labios procedieran a sofocar a su joven rival mientras sus senos devoraban su sexo inmovilizándole sus piernas y dándole una mezcla de placer y dolor. Rosa de bamboleaba de arriba hacia abajo con lo que se frotaban fuertemente sus senos con la pelvis de Lester mientras su vulva me atragantaba con la cara de él. Al cabo de unos minutos, Lester se desvaneció y quedo examine en el piso. Rosa permaneció otros minutos mas como disfrutando de su victoria y luego se levanto para sentarse en el pecho de su desvanecido joven rival, para enseñarle a su "publico" el fruto de su aniquilación sentándose en el estomago de Lester. Era evidente que el fue derrotado: Su cara estaba rojiza por falta de aire y su cuerpo agotado por la paliza que se le había dado. Ella se levanto y tenso sus senos con lo que se crecieron enormemente de su posición con sus pezones grandemente crecidos en señal de victoria. Finalizado el conteo, procedió a levantar a Lester del piso y ponerlo encima de un hombro para llevarlo a la enfermería a efecto de suministrarle oxigeno y luego tener una relación con el. Para el final quedo el combate entre Miss Wolf y Juan. Miss Wolf se paro en medio del mat anunciando su combate con Juan el cual sería en unos minutos mientras ella se cambiaba de ropa. Al cabo de un tiempo apareció la amazona con vestuario de impacto, siendo un top que contenía sus pechos y una cortisima falda de colegial que escondía una diminuta tanga de corazones rojos. Ella no calzaba tenis sino que estaba a pie desnudo. A un lado del mat, espero que Juan viniera a enfrentarla. Juan era un engreído campeón colegial de lucha y un incipiente pandillero juvenil, que había ganado varios torneos de lucha así como había participado en varios combates callejeros ganándolos todos. Él vestía un pantalón buzo y una camiseta y tenis de marca. Al ingresar, se sorprendió del buen cuerpo de Miss Wolf, su estatura y la musculatura que hacía gala. El combate comenzó con Juan pegando patadas a diestra y siniestra como también golpes con los puños y codos, los que eran repelidos por Miss Wolf, quien con una agilidad sorprendente paraba todos los intentos del muchacho por pegarle. Harto de no poder hacer ningún daño dado el conocimiento de su contrincante, Juan comenzó a insultar a Miss Wolf, con fuertes epítetos que hicieron enojar sobremanera a la matrona del gimnasio. Ella, mirando fijamente a su oponente, abrió sus brazos de lado a lado e invito a su rival a pegarle a placer, lo que Juan comenzó a mandar varias patadas al vientre de ella, sin hacerle daño alguno y luego mando varios puñetazos a sus pechos sin siquiera dañarlos. En una forma sucia, mando una patada durísima a la entrepierna de ella, y ¡No paso nada!, por lo que asustado espero la reacción de Miss Wolf. Sin inmutarse, ella agarro de la camiseta al joven y con un sonoro gancho a la mandíbula que lo envió a varios metros de donde estaba cayendo de bruces en el suelo. Luego lo levanto con facilidad con un pie y lo hizo parado para enviarle un recto al estómago seguido de una soberana patada a la cara con lo que cayo de espaldas al piso. Juan recordó sus habilidades de pandillero, por lo que saco una cuchilla de sus ropas y se le vino encima a Miss Wolf, quien agarro con una mano el arma y con un revés de judo, le quito su daga para hacerlo caer al piso por el impacto. En el suelo, sin miramiento alguno procedió a sentarse a un lado de él y puso sus fuertes piernas en su estomago para proceder a estrujárselo con sus fuertes muslos. Los macizos perniles de Miss Wolf, comenzaron a destripar las costillas, estomago, hígado y esófago de su oponente quien pegaba gritos de dolor por las fuertes embestidas de las poderosas piernas de Miss Wolf, quien torturaba a su rival apretando cada vez mas fuerte de manera que gritara mas duro. Pasados unos minutos, lo soltó abriendo sus piernas para que su cuerpo quedara libre. El muchacho se retorcía de dolor dado que sentía sus órganos internos como si los hubiera destruido una aplanadora por encima. Miss Wolf, agarro la cabeza de Juan por detrás y la empujo hacia lo mas profundo de sus piernas hasta llegar a su sexo donde se levanto un poco la mini falda que tenia puesta para que todas vieran la tanga de corazones que llevaba puesta que era muy corta pero se hacia mas corta con las monumentales piernotas de Miss Wolf, quien cerro sus piernas con el refuerzo de sus tobillos. Al principio, ella no apretó fuerte sus muslos contra la cabeza de su oponente como para dar tiempo y no dejarlo fuera de combate. Mientras lo sostenía firmemente entre ellas, conversaba animadamente con sus discipular e incluso -ajena totalmente a los esfuerzos desperados de Juan por salirse, despachaba documentación de su trabajo en el piso del mat. Juan se movía desesperadamente y con sus brazos apenas lograba cubrir una parte de los enormes muslos de su rival y su cabeza apenas podía moverse de donde estaba. Los gritos de él eran ahogados por el sexo de Miss Wolf, quien con su gran monte de Venus y labios vaginales, acallaban cualquier protesta que este hiciera e impedía que el pudiera hablar. Pasado un tiempo ella abrió las piernas y se levanto del piso dejando a Juan semi-atontado en el suelo viendo estrellas. Con ambas manos, lo cogió de la cintura en sentido inverso y lo levanto sin esfuerzo alguno del piso para aplicar un abrazo de oso al joven. La cabeza de Juan se la engullo sus muslos internos con lo que Miss Wolf lo bamboleaba de arriba hacia abajo con el objetivo de restregar su cara en su sexo mientras sus pechos procedían a hacer lo mismo con el sexo del joven y a la vez, sus fuertes brazos apretaban durísimo la sección media de el. Al cabo de cierto tiempo lo hizo levantado con sus dos manos por encima de su cabeza haciendo press militar con su cuerpo y luego lo hizo tirado al piso. En el suelo Juan vio con horror que Miss Wolf agarraba sus muñecas para dejarlas fijadas en el suelo y procedió a sentarse a horcajadas encima de su cara abriendo ampliamente sus fuertes y grandes muslos, de manera que su sexo quedara a rozando su cara y le dio una gran vista de todo el esplendor de su trasero y de su sexo, de los cuales la tanga de corazones que usaba apenas podía contener toda la amplitud de sus fuertes carnes. Las rodillas de ella, se colocaron encima de sus brazos y el joven comenzó a gritar del horror al ver que el amplio trasero de Miss Wolf se aprestaba a ponerse encima de su cara. Miss Wolf, se mantuvo por un rato encima de Juan esperando que su desesperación se volviera en miedo, rozando su sexo en los labios y nariz de él. Posteriormente, en forma lenta fue bajando su trasero para fijarlo en la cara de Juan con todo su peso de trescientas libras de sólido músculo, aplastándole con las grandes carnes que eran sus nalgas mientras se meneaba continuamente restregando su sexo en la cara de Juan con lo que sus glúteos, sexo y trasero se lo comían cada vez mas acompañado de pequeños saltitos donde su enorme culo saltaba de la cara de Juan a la vez que se lo restregaba en su faz. Al cabo de unos segundos, Juan quedo inconsciente y Miss Wolf se levanto en sus rodillas para que sus alumnas vieran como había derrotado al pandillero quien estaba examine en el piso. Luego se levanto y con una mano, alzo al joven del piso, se lo cargo en su hombro directo a al enfermería para estabilizarlo y enviarlo al hospital. Fin. CUALQUIER COMENTARIO, CRITICA O LO QUE SE LE OCURRA, puede enviarla al correo electrónico horus256@yahoo.com. Gracias.