LEONOR Y SANDRA, MADRE E HIJA - PARTE 1 Por Esper, esper_cl@yahoo.es Javier es un kinesi�logo que encuentra a una asombrosa conocida de cuando estaba en el colegio, y conoce a su no menos asombrosa madre ***** Un d�a domingo en la ma�ana, Javier estaba en su departamento de soltero viendo por TV programas de noticias matutinos. A sus 30 a�os acababa de comprarse su departamento en un buen barrio de Santiago de Chile. Siendo kinesi�logo trabajaba en una cl�nica llamada "Cl�nica los Olmos", y adem�s hac�a trabajos particulares. No era un hombre rico, pero estaba ganando suficiente dinero para comprarse bienes y aumentar su patrimonio. Un par de meses antes hab�a terminado una relaci�n de 7 a�os con una chica. En su momento pensaron casarse, pero posteriormente las cosas no se dieron bien. Como a las 11 recibe un llamado de su amiga Gabriela, quien era tecn�loga m�dico en la misma cl�nica donde trabajaba �l. Ella le dice que lo acaban de llamar unas parientes porque necesitan un kinesi�logo. En un principio Javier no se vio muy entusiasmado por lo que le dijo su amiga. No ten�a planes, pero quer�a ir a jugar tenis al club del cual era socio. Sin embargo, lo que Gabriela le dir�a luego le despertar�a el inter�s. GABRIELA: las dos son estupendas. Son madre e hija y tienen dinero as� que te van a pagar lo que les pidas. JAVIER (medio en serio y medio en broma): �estupendas como t�? GABRIELA: jajajajaa, Gracias por el piropo. Bueno, en la familia somos todas estupendas. Y casi todas son morenas como yo. JAVIER: Muy bien, dales mi celular y que me llamen. �Cu�l es el nombre de ellas? GABRIELA: La del esguince se llama Sandra y est� ahora en la casa de su mam� que se llama Leonor. Leonor es prima m�a, y es mayor que yo. Por lo tanto la Sandra es mi sobrina y es un poco menor que yo. A los 5 minutos suena su celular. Una voz femenina lo saluda y le dice que es Sandra, la pariente de Gabriela. De inmediato le explica su problema. SANDRA: Tengo un esquince en el tobillo. Ya vi un traumat�logo y me dijo que ten�a que hacer tratamiento kinesiol�gico. Ten�a pensado empezar el martes pero ahora me est� doliendo y quisiera empezar hoy. �Puedes venir a mi casa? Te lo voy a agradecer y pagaremos lo que corresponda. JAVIER: El �nico detalle es que estoy sin auto, porque lo estoy cambiando. �D�nde vives? Yo vivo las Condes, cerca de la Cl�nica. SANDRA: Uf, estamos en La Dehesa. Espera un poco por favor. Javier escucha como Sandra habla con otra persona. A los pocos segundos aparece otra voz de mujer, quien se identifica como Leonor la madre de Sandra. JAVIER: Hola ... LEONOR: Javier. Nos podemos encontrar en la estaci�n de servicio cerca de donde vives. Es una que est� al lado de un local donde venden motos. JAVIER: Est� bien. �A qu� horas desean que nos juntemos? LEONOR: A las tres, si te parece bien ... JAVIER: me parece bien. Tenemos que reconocernos de alguna manera. LEONOR: Te va a ser f�cil reconocerme. Estar� en un Volvo station gris oscuro. Soy morena, uso el pelo desordenado y estoy con un vestido negro de verano. JAVIER: Yo soy casta�o y estar� con jeans y una camisa blanca estilo casual. Adem�s llevar� una mochila negra. A las tres en punto Javier lleg� caminando a la estaci�n de servicio. El Volvo gris oscuro ya estaba estacionado con una mujer dentro, la que estaba hablando por celular. Se ve�a seria y con cara de pocos amigos. Sin duda era Leonor. Javier se acerca por el costado y ella lo ve. Ambos sonr�en y la expresi�n severa desaparece. Ella hace un gesto para que �l que espere un poco para terminar el llamado. Estaba con la puerta del auto abierta. Javier nota que es una mujer muy grande y robusta, de entre 45 y 50 a�os. El pelo lo ten�a desordenado tal como lo hab�a dicho. Su vestido era relativamente corto y permit�a ver unas piernas gruesas pero bien proporcionadas y s�lidas. El vestido ten�a algo de mangas, pero se pod�a apreciar los hombros bien formados y anchos. A los pocos segundos el llamado termina y se baja del auto. Javier se impresiona por su estatura, la que calcula que es de alrededor de 1,84. Ella se agacha para darse un beso en la mejilla de saludo. Sin duda era m�s alta que el 1,77 de Javier. LEONOR: Hola Javier ... . JAVIER: Hola �c�mo est�? LEONOR: No me hagas sentirme vieja trat�ndome de usted. Dime Leonor o Leo y tut�ame. JAVIER: Muy bien, Leonor. Es un gusto conocerte. Enfilaron en el auto. Javier pensaba que si le hubiera dicho que se encontraban fuera del auto, �l la habr�a reconocido por su gran tama�o. Tambi�n pens� que las manos de ella eran muy grandes. Vio que no llevaba argolla de matrimonio. En un sem�foro en el que el volvo se detuvo, Leonor mir� al costado y salud� con una se�a a un hombre aproximadamente de su edad. Se encontraba en un auto igualmente lujoso que el de ella. LEONOR (dirigi�ndose a Javier): Es mi ex esposo. JAVIER: Ya veo. LEONOR: Eso s�, no es el pap� de Sandra, sino de mis dos hijos menores. Javier asinti� con la cara. Consider� que lo prudente era no hacer m�s preguntas. A los 10 minutos llegaron a su casa, la que era grande y de barrio alto de Santiago. Abri� el port�n con control remoto y entraron en el volvo a la casa. Una vez adentro, se dirigieron a una pieza de estar donde estaba Sandra. Al entrar se saludaron y se quedaron mirando fijamente como reconoci�ndose. SANDRA: ��Holaaa!!! JAVIER: Holaaaaa LEONOR (algo asombrada): �Se conocen? SANDRA: Pues s�, hace mucho que nos conocimos. JAVIER: Te recordaba m�s con el apodo de Sandy. As� te dec�an, si no me equivoco. SANDRA: As� es, pero mi nombre es Sandra. En el colegio algunas amigas me dec�an Sandy. Mi familia y amigos me dicen Sandra. As� que ya sabes c�mo llamarme. JAVIER: Muy bien, Sandra. Sandra sonr�e ante lo �ltimo. JAVIER: Tenemos unas cuantas historias. LEONOR: A ver, cu�ntenme m�s acerca de c�mo se conocieron. Esto me gusta. JAVIER: Viaj�bamos juntos en la misma micro cuando est�bamos en el colegio. Nos encontr�bamos muchas veces. SANDRA (dirigi�ndose a su madre): �Te acuerdas de Doris una compa�era m�a del colegio? Algunas veces la llev� a la casa cuando viv�amos en Las Condes. LEONOR: S�, me acuerdo de ella. Saliendo del colegio se fue a vivir fuera de Chile, si mal no recuerdo. SANDRA: S�, ella misma. Bueno, Javier y ella fueron novios. LEONOR: Mira �eh! SANDRA: Fue Doris quien me present� a Javier. Sandra y Javier se conocieron cuando �l ten�a 15 a�os. Ella ten�a un a�o menos. Para entonces �l estaba de novio con Doris. Un d�a viajaron en micro, la pareja junto con Sandra, y fue as� como fueron presentados. Javier y Sandra se vieron hasta los 20 a�os, cuando ella se cambi� de casa. Nunca llegaron a ser del todo amigos, pero conversaban c�lidamente en los viajes en locomoci�n colectiva. Ella era morena como su madre, pelo lacio, el que llevaba muy largo cuando eran adolescentes y ahora estaba a la altura de los hombros. Era de cuerpo regular, esbelta. A Javier siempre le llamo la atenci�n el tama�o de sus manos y mu�ecas. Cuando iban de pie en la micro se ve�an casi de la misma estatura. Javier recordaba que aluna vez Sandra hab�a dicho que med�a 1,75. Se bajaban en la misma esquina, y ah� Javier tomaba camino rumbo al norte, y Sandra hacia el sur. Adem�s se encontraban muchas veces cuando tomaban la movilizaci�n hacia el centro. JAVIER: Cuando me dijeron que viv�an en la Dehesa tampoco lo relacion� contigo, porque me acordaba de Las Condes. SANDRA: y yo no sab�a que eras kinesi�logo. Recordaba que hab�as entrado a estudiar para profesor de educaci�n f�sica. JAVIER: As� fue, pero estudiando me di cuenta que quer�a ser kinesi�logo y me cambi�. LEONOR: �Qu� simp�tico reencuentro! JAVIER: Denme la orden m�dica para comenzar los masajes. Mientras los hago podemos seguir conversando. As� lo hicieron. Javier vio las indicaciones del m�dico y comenz� a hacer los masajes. JAVIER (dirigi�ndose a Leonor): Me acuerdo que Sandra es muy fuerte y sabe artes marciales. Pude darme cuenta de ello perfectamente. LEONOR: Desde muy ni�a estudi� artes marciales. Yo quise que se supiera defender. La fuerza la fue desarrollando sola, con los ejercicios. Yo misma soy muy fuerte y ella quiso ser como yo, y creo que me super� jajajajaa. JAVIER: hace mucho que s� de las dos cosas. De hecho una vez me defendi�. SANDRA: JAJAJAJA fue esa vez que un tipo te increp� por haberle agarrado el trasero a su novia en la micro. LEONOR: JAJAJAJAJA �Y fue verdad que se lo agarraste? JAVIER. No, para nada. Eso fue hace unos 10 a�os. LEONOR: No sab�a de esa an�cdota �me la cuentan? LA SUPUESTA AGARRADA DE TRASERO Un d�a como muchos, Sandra y Javier se encontraron en la micro de regreso a sus casas despu�s de haber tenido clases o trabajo en el d�a. La micro estaba un tanto llena e hicieron el trayecto de pie conversando. Javier estaba estudiando en el segundo a�o educaci�n f�sica. Al a�o siguiente se cambiar�a para estudiar kinesiolog�a. Sandra hab�a salido del colegio, pero no entr� a estudiar ese mismo a�o. Se dedicaba mucho a las artes marciales y hac�a trabajos temporales como promotora y atender las tiendas que ten�a su familia. A veces atend�a el gimnasio de unos parientes en la parte administrativa. En un momento una chica pasa detr�s de Javier y Sandra para bajarse. Antes de descender mira a Javier y lo increpa "oyeeeee", le dice. Javier la mira extra�ado como no sabiendo que ocurr�a. LA CHICA: No me mires con esa cara de inocente. Es feo lo que hiciste. SANDRA (igualmente extra�ada): �pero qu� pasa? LA CHICA: Lo que pasa es que tu amigo o novio me acaba de dar un agarr�n. JAVIER: ���qu�eeeee??? Est�s loca. SANDRA: Est�s muy equivocada. �l est� conversando conmigo y nada de eso ha hecho. Lo que sucedi� entonces fue que aparece otro joven, a todas luces el novio de la chica. Era decididamente m�s alto que Javier y probablemente m�s fuerte. Usaba barba. Hab�a visto todo el di�logo. Se dirigi� a la chica "b�jate no m�s, yo lo arreglo". "Muy bien, ll�mame en la noche" respondi� la chica y baj� en el paradero. Mir� a Javier como diciendo, "est�s en problemas". La micro parti� y Sandra y Javier miraron al tipo. �l qued� imp�vido como escondiendo algo. A�n faltaban 5 paraderos para que se bajaran, pero Sandra le dijo que se bajaran antes y caminaran. Al bajarse ellos, el tipo hizo lo mismo y los sigui�. Ellos optaron por darse vuelta y encararlo. JAVIER: �Qu� pasa? EL TIPO: No seas hip�crita. Le agarraste el trasero a mi novia. JAVIER. Yo no le he agarrado el trasero a nadie. Bueno, �y qu� vas a hacer? �Me vas a pegar? EL TIPO: Podr�a agarrarle el trasero a tu novia aqu� mismo, pero prefiero darte un par de trompadas. SANDRA: Mira, a m� no me vas a agarrar ni aunque quieras. No soy su novia, y l�rgate que no queremos problemas. El tipo se acerca a Javier, lo agarra con una mano de la solapa y estira la otra mano empu�ada para darle un golpe. Pero en eso Sandra reacciona m�s r�pido, le detiene la mano y le da una puntada con el dedo en el costado de la barriga. El tipo grita "auuuu" y se toma la parte adolorida. Suelta a Javier y mira asombrado a Sandra. Iba a iniciarle otro ataque a Javier, pero la chica lo toma por el brazo y por el cuello y logra inmovilizarlo. El tipo se retorc�a de dolor. SANDRA: Ahora vas a escuchar. Mi amigo no le agarr� el culo a nadie. Yo estaba con �l y me habr�a dado cuenta. Si quieres pelear vas a tener que hacerlo conmigo. EL TIPO: Nunca le he pegado a una mujer. SANDRA: No ser� esta la primera vez entonces. Sandra lo suelta. El tipo hace un gesto como de desprecio con el brazo, se da la media vuelta y se larga. JAVIER: Es incre�ble lo que vi. El tipo es grande y fuerte y lo inmovilizaste. Te debo una. SANDRA: Nada me debes. JAVIER: �Cu�l de las artes marciales es la tuya? SANDRA: Primero Judo y luego kung -fu. Tengo cintur�n negro en las dos especialidades. JAVIER: Con raz�n pudiste tan f�cil. SANDRA: Tomemos otra micro y cada uno a su casa. Eso hicieron. SIGUEN CON LOS MASAJES EN LA CASA DE LEONOR LEONOR: No sab�a de eso. No me hab�as contado, Sandra. SANDRA: Eso pas� cuando estabas de viaje en Brasil. Despu�s se me pas� cont�rtelo. JAVIER: Fue ah� cuando me di cuenta que era mejor no hacer enojar a Sandra. Los tres r�en ante ese comentario. JAVIER: �C�mo te ocurri� el esguince? LEONOR (en tono de reproche): mmmmmmm JAVIER: Lo siento, quiz�s no deb� preguntar. LEONOR: Yo tengo que ir al supermercado a comprar una pocas cosas. Vuelvo en una hora y ah� te puedo ir a dejar, Javier. �Te parece bien? JAVIER: S�, est� bien. Leonor se retira y Javier con Sandra quedan solos. SANDRA: M� mam� qued� molesta con la historia del esguince, y tiene toda la raz�n. Fui demasiado temeraria. JAVIER: �Quieres contarme? SANDRA: Fue una pelea que tuve, con dos tipos. Hay un parque en la comuna de la Reina donde casi violan a la hija de un matrimonio amigo. La chica logr� escapar, por suerte. JAVIER: �y qu� m�s? SANDRA: Fui a la casa de los pap�s de la chica. Se me ocurri� volver caminando hasta un Mall. Nunca habr�a querido enfrentar al violador. Ni siquiera hubiera querido encontrarlo. De hecho pens� que si hab�a habido un tumulto por el intento de violaci�n en ese parque, con seguridad el tipo se habr�a ido para siempre. JAVIER: Me imagino no se hab�a ido para siempre. SANDRA: Es como dices. No se hab�a ido para siempre. Se me apareci� de repente. Se sac� el cintur�n, me mir� amenazadoramente y me empez� a decir cosas muy groseras de contenido sexual. Alguna vez escuch� que a los violadores les gustaba que sus v�ctimas mostraran miedo y hacerles da�o. Yo lo qued� mirando imp�vida sin reaccionar. Lo que se me ocurri� fue no mostrarle miedo y estar lista para reaccionar. Por un momento el tipo pareci� desconcertarle que yo no hablara y no mostrara miedo. Se me acerc� y me mand� un golpe de pu�o circular en la cara. Me ech� hacia atr�s y logr� esquiv�rselo. De inmediato le mand� una patada en la barriga y otra en la cara. El tipo cay� y peg� tres gritos de dolor. JAVIER: Bien merecido. �Y qu� sigui�? SANDRA: El desgraciado se puso de pie. Le segu� dando golpes. Le quebr� la nariz y al caer se quebr� un brazo. Esto fue todo con el tipo. En eso sent� que alguien corr�a detr�s de m� acerc�ndose. Era un secuaz del violador. Como vi que me iba a atacar, le di dos patadas, una en la canilla y en el pecho. Se cay�, luego se puso de pie y arranc�. JAVIER: �Y por qu� todo eso le molest� a tu mam�? Aparte de lo impresionante que es, creo que te defendiste. SANDRA: Ella piensa que deb� haberle dado una buena patada en los test�culos y luego haber arrancado. Hubiera sido lo mejor, pero en el momento uno reacciona sin pensar tanto. JAVIER: Es cierto. Pero siempre despu�s a uno se le ocurren las mejores soluciones. Pas� el rato y Sandra se empez� a sentir mejor. Javier le dijo que pod�a caminar pero muy lento y sin hacer mayor esfuerzo. Ella pregunt� si pod�a conducir y Javier le dijo que s�, pero sin hacer movimientos bruscos. SANDRA: �Supiste alguna vez de Doris? JAVIER: No. Como debes haber sabido se fue a vivir a Espa�a. Su idea era ir por un tiempo. Ten�a parientes en Barcelona, y ah� pod�a vivir, cosa que hizo. Ah� conoci� a otra persona y me dej�. O sea la distancia hizo lo suyo, como sucede con frecuencia. SANDRA: No sab�a ese detalle de c�mo hab�an terminado. Yo le perd� la pista. No �ramos tan amigas. Disculpa por hab�rtelo preguntado. JAVIER: No hay problema. Pens� que lo pod�as saber. SANDRA; En realidad no lo sab�a. Alguien me cont� que hab�an terminado pero no sab�a la historia. �ramos amigas, s�, pero era porque �ramos compa�eras y tom�bamos la misma locomoci�n. Despu�s de que salimos del colegio dejamos de vernos. La �ltima vez que la vi fue cuando se le hizo una despedida de mujeres en la casa de otra compa�era. JAVIER: �Estudiaste algo? �A qu� te dedicas? SANDRA: Soy profesora de media, de historia y geograf�a, pero no trabajo en eso. Trabajo en una universidad en la casa central en la parte acad�mica. Arriendo un departamento en Providencia de un dormitorio y as� me puedo ir caminando a mi trabajo. Me vengo los fines de semana a la casa de mi mam�. Y a veces vengo en la semana. Estaban en una especie de sala de estar. Sandra estaba semi acostada en un div�n y Javier sentado en una silla haci�ndole masajes. �l vio que en la pared hab�a unas fotos relacionadas con basquetbol. Una de las fotos mostraba a una mujer saltando para encestar. Otra de ellas la misma mujer le daba botes a una pelota. JAVIER: �Y esas fotos? �Son de tu mam�? SANDRA: S�, es mi mam�. Fue una gran jugadora de basquetbol incluso despu�s de que yo naciera. JAVIER: �Mira qu� interesante! SANDRA: Como pudiste ver es muy alta. Yo lo soy, pero ella lo es mucho m�s. JAVIER: S�, lo not�, es m�s alta que yo incluso. SANDRA: Yo mido 1,75 y mi mam� mide 1,85. JAVIER: 10 cent�metros m�s. Me imagino que tu pap� no es muy alto. SANDRA: Es m�s bajo que yo, mide 1,70. Definitivamente mi estatura se la debo a la familia de mi mam�. Javier consider� en ese momento que no deb�a hacer m�s preguntas, pero Sandra continu�. SANDRA: Ellos nunca se casaron. Soy fruto de un apasionamiento, jajajajaa. Mi pap� fue profesor de mi mam� en el colegio. Poco a poco me fueron contando la historia. Yo me cr�e con mi mam�, primero en la casa de mis abuelos y luego con el que fue su marido. Hace un a�o se divorci�. JAVIER: �Y tienes contacto con tu pap�? SANDRA: Mucho. Toda mi vida lo he tenido, y nos llevamos muy bien. De hecho de cara soy m�s parecida a �l. Siempre reconoci� la paternidad y quiso apoyarme en lo que necesitara. Claro que la familia de mi mam� es mucho m�s adinerada por lo que no se justificaba que �l gastara mucho en m�. De todas maneras, siempre trat� de hacer salidas entretenidas conmigo y hacerme buenos regalos. Su familia vive en el campo y de ni�a siempre me llevaba. Me encantaba. Sal�a a recorrer y andar a caballo. JAVIER: �Llevas el apellido de �l? SANDRA: As� es. En ese momento Javier termin� con los masajes. Los pies son una de las zonas m�s er�ticas del cuerpo. Fij�ndose en como hab�a reaccionado Sandra, le cupo la posibilidad de que hubiera sentido alg�n placer de tipo sexual. JAVIER. Ya est�, termin� la sesi�n de masajes. Ponte de pie y camina suavemente. Ella le obedeci� y not� de inmediato la mejor�a. SANDRA: Eres muy bueno en lo que haces, Javier. Me quitaste el dolor y adem�s los masajes estuvieron bien agradables, relajantes. JAVIER: Tienes que tomarla terapia de todas maneras. De lo contrario el dolor o molestia te puede volver. SANDRA: �Me puedes hacer t� el resto de los masajes? Me gusta como trabajas. Y adem�s ha sido muy entretenido que conversemos. JAVIER: Pues claro. Tenemos que ver si nuestros horarios son compatibles. En ese momento lleg� Leonor de regreso del supermercado. SANDRA: Mam�, yo voy a ir a dejar a Javier. Me dice que puedo manejar. LEONOR: Muy bien. Sandra estaba con licencia m�dica por toda la semana, de modo que los masajes se hicieron en la casa de su mam� donde se qued� durante ese tiempo. Javier acud�a en la tarde, despu�s de su trabajo en la cl�nica. Ambos se daban cuenta del componente er�tico que hab�a. Al mismo Javier le comenz� a excitar el ver la excitaci�n de ella. El primer d�a estaban los hermanos de Sandra revoloteando por la casa. Eso hac�a que la excitaci�n de ambos se interrumpiera. El segundo d�a estaba la casa sola. Cuando Javier toc� la puerta, Sandra fue a abrirle. Como saludo lo abraz� con fuerza en la cintura y lo bes� en la comisura de los labios. Empezaron los masajes en el tobillo. Sandra le pidi� que lo hiciera en los pies tambi�n. Sab�a que se iba a excitar, cosa que ocurri�. Javier se dio cuenta y tambi�n se excit�. Terminaron haciendo el amor, lo cual no fue la �ltima vez. Al poco tiempo se convertir�an en pareja.