La Catira V.
Por El Bohemio de Caracas.
La historia de una rubia estudiante universitaria que se transforma en una verdadera heroína para su novio. 

Quinta Parte: Defendiendo a una amiga.


Caracas, julio del 2000. Pasó un año ya. Nuestros amigos están finalizando
el segundo de año de la carrera y hasta ahora no nos han decepcionado, muy
aplicados están los muchachos, pues volvieron a aprobar todas las 
asignaturas.
Aunque cuentan con una oveja negra: Jhonny, quien del grupo es el que menos
estudia, pero el carajo logra pasar los exámenes. Los demás no se lo 
explican
pero bueno... están agradecidos con él por ser la persona que los animó 
cuando
comenzaron a ver las materias difíciles de la carrera. Incluso Simón, el más
aplicado de ellos, solía tener problemas de confianza a la hora de encarar
asignaturas como Investigación de Operaciones I, materia que verían los
próximos dos años que siguen. Y esa fue la cátedra que más les quebró la
cabeza, no sólo a ellos sino también al curso entero. Lo que sigue pasó 
antes
de la fiesta de fin del año académico...


-COÑO, MANO ¡ESTA MATERIA SÍ QUE ES PELÚA!- dijo Mario una vez, cuando 
estaban
viendo la mitad del contenido de dicha asignatura. Simón cumplía con las
asignaciones, pero llegó un momento en que se embotaba de tanto estudiar que
llegó a reprobar dos de los cinco exámenes contemplados en el plan de 
evaluación.
Si ese era el desempeño de Simón ¿qué quedaría para los demás? Rosalía se 
quejaba
amargamente -HE DESCUIDADO LAS DEMÁS MATERIAS PARA ATENDER ESTA Y SIENTO QUE 
LO
HAGO POR NADA-, mientras que Carmen agregó -MIS NOTAS VAN A BAJAR. TRAÍA 
BUENOS
PROMEDIOS DEL AÑO PASADO. AHORA POR CULPA DE ESTA MATERIA... BUENO- Carlos y
Mario estaban jugando su segundo torneo de fútbol sala dentro de la escuela.
En un campeonato de 12 equipos, dividido en dos grupos de seis, el suyo, al
que bautizaron con el nombre de Mancha Verde FC, por el color de las 
franelas,
estaba haciendo mejor papel que el año pasado: ganaron sus primeros tres 
juegos
de los cinco que consta la primera ronda, pero no estaban clasificados aún y
necesitaban ganar por lo menos uno de los dos encuentros restantes para
asegurar su pase. Pues bien, debido a un examen de la materia en cuestión,
ambos debieron perderse el cuarto juego y para colmo de males, el equipo se
presentó con otras bajas además de las de ellos dos, pues, el único arquero 
que
tenían se lesionó, debiendo cubrir Lorenzo los tres palos, un amigo de otro 
curso
de la misma escuela, quien era el delantero goleador del equipo. Fue una 
decisión
suya. Y jugaron ante el equipo que los derrotó en el ultimo encuentro del 
año
pasado, que se llamaba Orinoco. ¿Resultado? Este conjunto los goleó por 15 a
6, provocando un cuádruple empate para las dos plazas clasificatorias a las
semifinales, pues se dieron otros resultados más inesperados todavía, 
quedando
el cuadro de nuestros amigos como el más comprometido, dada la cantidad de
goles que recibieron, debiendo golear en el último compromiso y esperar por
los otros resultados. Mario y Carlos, que se habían tomado en serio este
torneo, tenían otro dolor de cabeza más.


Quedaba Norelys. También se vio mermada en su rendimiento académico. Y no
solo eso, tuvo que dejar de asistir al gimnasio. Primero iba cuatro veces a
la semana, reservándose un día para estudiar bien, pero pronto se vio 
obligada
a ir tres veces, y luego dos, hasta que, obstinada, decidió suspender su
rutina en él para dedicarse de lleno a las materias.-NO PUEDO DESCUIDARME-
decía nuestra protagonista catira, quien primero se quejó que Carlos dejara
de acompañarla a ella a hacer ejercicios. Carlos no tardó en darse cuenta de
lo duro que les iba a resultar ese segundo año, así que debió de dejar de
asistir al gimnasio, cosa que a Norelys le molestó un poco. -¿POR QUÉ NO
DEJAS EL FUTBOLITO TAMBIÉN?- le reclamó la catira en una ocasión. Ambos
discutieron y se enojaron, pero a los días se contentaron.-NO PODEMOS DEJAR
QUE NUESTRA RELACIÓN SE ESTROPEE POR NO ENTENDERNOS Y COMPRENDERNOS, 
CATIRITA
LINDA- le dijo Carlos mientras se reconciliaban. -TU PASION SON LAS PESAS Y
ESO TE LO RESPETO. LA MIA ES EL FUTBOL SALA, NIÑA, POR FAVOR, ENTIENDE- le
rogó su novio. Y así lo aceptó Norelys.


Para el cuarto examen de la asignatura, que lo presentaban el miércoles a
primera hora, nuestros muchachos se reunieron en casa de Jhonny, como lo
habían hecho desde que empezaron a estudiar juntos. Estuvieron desde la 
noche
del martes tratando de resolver una guía de ejercicios resueltos, pero por
mas que se aplicaban, no podían llegar a los resultados que tenía la guía.
Pasada la media noche, los muchachos estaban a punto de tirar la toalla
cuando Jhonny se levantó de la silla y empezó a hablar. Se refirió al grupo
en sí. Lo que realmente hizo Jhonny fue tratar de rescatarlos 
psicológicamente
y él también, haciendo ver las virtudes y pecados que tenían cada uno de
ellos como persona. Prácticamente hizo una terapia de grupo improvisada. Lo
cierto del caso es que le subió la moral al grupo y una vez finalizadas sus
palabras, los muchachos se entregaron de lleno a resolver los ejercicios, 
los
cuales poco a poco se iban dando. Estuvieron hasta cerca de las cinco de la
mañana estudiando.


Finalmente, presentaron el examen, aunque tenían sueño. Se durmieron a las
cinco de la mañana para levantarse a las seis y media, tomar café y luego
salir a la universidad. Menos mal que Jhonny vivía cerca. Y como la 
constancia
suele ser premiada, los muchachos se sintieron capaces de resolver un examen
de esa materia por primera vez, pese al poco sueño que conciliaron la noche
anterior. El profesor dio las notas el día viernes y ¡sorpresa! Tanto 
quebradero
de cabeza dio sus frutos. Los muchachos aprobaron el examen con las más 
altas
calificaciones, paliando así un poco las bajas y pésimas notas de los 
primeros
exámenes. Todos estaban contentos y por supuesto, el ánimo por las nubes.


Ese día viernes los muchachos se fueron a celebrar. Fueron a un 
bar-restaurant
cercano y empezaron festejar con cervezas. Entre birra y birra, los 
muchachos
se felicitaban mutuamente y compartieron mucho más su compañerismo. A
continuación Carmen dijo que debía ira hacer una llamada y que saldría un
momento. Pidió a Rosalía y a Norelys que la acompañaran, quedando Simón,
Mario, Jhonny y Carlos en el local. Las chicas se dirigían a un centro de
comunicaciones cuando se toparon con una mujer conocida de Rosalía: era 
Raiza,
la ex del novio de Rosalía, un muchacho de nombre Leandro, quien trabaja en
un local reparando computadoras.


Raiza la vio y enseguida empezó a provocar a Rosalía, quien optó por 
ignorarla
al principio. Pero las palabras de su rival subieron de tono, que 
degeneraron
en improperios, haciendo que Rosalía se volteara y empezara a contestarle.
Carmen y Norelys hacían todo lo posible por calmarla. -CHICA ¡NO LE PARES
BOLA! ELLA ESTÁ RESENTIDA, ESO ES TODO. TRANQUILA!- Le decía Carmen mientras
Norelys sujetaba a Rosalía. -¡DÉJAME QUIETA CATIRA, QUE A ESTA FALTA DE
RESPETO LA VOY A JODER!- decía Rosalía tratando de safarse de la mano de
Norelys. Rosalía notó la fuerza de su amiga y mirándola a los ojos le pidió
que la soltara. -NO VAYAS A COMETER UNA TONTERÍA, ROSA, QUÉDATE TRANQUILA-
le rogaba Norelys, pero fue en vano. Apenas aflojó la tensión de su mano,
Rosalía se soltó y fue al encuentro con su rival. Se cruzaron palabras y de
ellas pasaron a los hechos, solo que la amiga de Carmen y Norelys llevó la
peor parte: Raiza le conectó un derechazo al rostro de Rosalía y esta cayó 
de
largo a largo. Una vez en el piso su contrincante, Raiza la agarró a patadas
de manera salvaje, tratando incluso de pisotearle el rostro a una Rosalía 
que
no daba señales de reponerse, todavía acusando el golpe recibido. Finalmente
una de las patadas de su rival dio de lleno en el estómago de la amiga de
Norelys y le sacó el aire. Fue cuando intervinieron Norelys, Carmen y 
algunos
transeúntes.


Mientras en la calle se armaba la de "San Quintín" con las muchachas, en el
bar los muchachos pedían otra ronda de cervezas, sin darse cuenta de lo que
sucedía con sus amigas, quienes estaban bastante retiradas del lugar de
reunión. Mario y Carlos se pusieron a conversar acerca del próximo juego del
torneo. - NO SE COMO VAMOS A HACER, PERO TENDREMOS QUE "PARIR" LOS GOLES EN
ESTE ULTIMO JUEGO- decía Carlos, cuyo rostros alegre se transformó de nuevo
en una nueva cara de preocupación, contagiando a Mario. -NO SERÁ TAN FACIL.
EL JUEGO ES CONTRA LOS QUE QUEDARON DE TERCEROS EL AÑO PASADO- dijo Mario, a
lo que Carlos preguntó -¿QUIÉNES? ¿LOS DE GÉNESIS?-, -SI, CARLOS, LOS DE
"GÉNESIS", SOLO QUE AHORA SE CAMBIARON EL NOMBRE Y SE PUSIERON "OSOS 
POLARES",
PUES SE REFORZARON CON CHAMOS DEL TURNO DE LA NOCHE, QUE LE ECHAN BOLAS.
JUGAREMOS ESTE MIÉRCOLES QUE VIENE, A LAS OCHO DE LA NOCHE- Para sorpresa de
los dos salistas (así se les denomina a los jugadores de fútbol sala)
intervino Simón -ESE EQUIPO JUGO EL ULTIMO PARTIDO DE LA JORNADA PASADA Y
GANO APRETADAMENTE. NO LES HA IDO BIEN ESTE AÑO-, -¿Y TÚ COMO SABES ESO, SI
A TI NO TE GUSTA EL FUTBOL?- preguntó Mario, -ES QUE ME CONSEGUI HOY 
TEMPRANO
A LORENZO. PREGUNTÓ POR USTEDES DOS, NO LOS VE DESDE QUE JUGARON JUNTOS LA
ULTIMA VEZ, ENTONCES ME ECHÓ EL CUENTO- respondía Simón. Definitivamente,
los estudios les había absorbido la mayor parte del tiempo. Jhonny había ido
al baño y se reincorporó a la mesa, entonces, en su tono jocoso de siempre
preguntó a Carlos como le iba con Norelys -¿YA NO PELEAN TANTO? ¿QUÉ TAL SE
COMPORTA LA CATIRA AHORA?- entonces Carlos dijo que ya todo se había 
aclarado.
Les habló de su relación, pero no les dio mas detalles. Trató de aclarar 
como
pudo una pregunta del mismo Jhonny, quien estaba deseoso de ver por qué
Norelys es tan conservadora al momento de vestirse -SI HACE EJERCICIOS COMO
USTEDES DOS NOS CONTARON... ELLA DEBERÍA ESTAR ORGULLOSA DE TENER UNA FIGURA
COMO NOS CONTASTE LA OTRA VEZ-, Carlos les había dicho que Norelys estaba 
bien
buena, pero que simplemente no le gusta exhibirse. No les describió 
exactamente
la verdadera contextura del cuerpo de la catira. Y menos de la fuerza y 
habilidades
que ella tenía. -ESPERO QUE LAS MUCHACHAS NO TARDEN MUCHO- dijo Mario.


De vuelta a la calle, unos caballeros separaron a Raiza de Rosalía, mientras
la catira y Carmen fueron a auxiliar a su amiga. Raiza decía improperios,
reclamando a Rosalía por haberle quitado a quien todavía considera su novio.
Carmen y Norelys la ayudaron a levantarse y cuando se disponían a irse, 
Raiza
también se metió con ellas. Carmen se volteó a contestarle, mientras la
catira preguntaba a una llorosa Rosalía quién era esa salvaje que la golpeó.
Le explicó quien era -SI QUIERES LE DOY LO SUYO POR TI. TÚ ME DICES- Rosalía
dijo -CHICA, ESA CARAJA ES ARRECHA ¿NO VISTE COMO ME GOLPEÓ? A TI TAMBIÉN TE
PUEDE DAR- Norelys le dijo que no se preocupara.


Entonces, uniéndose a Carmen, la catira se le dirigió a Raiza y le preguntó
-¿QUIERES PELEA?- a lo que la agresora de Rosalía le espetó -¡VENTE PUES,
VAMOS A DARLE!- entonces, la catira dijo a su amiga -AGARRA AQUÍ A ROSA
MIENTRAS LE DOY A ESTA LO SUYO-, -¡MOSCA NORELYS!- Aconsejó Carmen, quien no
conocía muy bien que digamos a la catira.


En el bar, los muchachos seguían conversando, esperando por las chicas, sin
saber lo que estaba sucediendo con ellas a unos cuantos metros de distancia.
Jhonny se puso a hablar sobre ellas, decía lo que pensaba. -TENEMOS MUY
BUENAS COMPAÑERAS, MUCHACHOS. EN EL FONDO LAS APRECIO, NO SÉ SI USTEDES
PIENSAN LO MISMO-. Simón manifestó que sentía cierta atracción por Rosalía y
los muchachos bromeaban con él -¿POR QUÉ NO LE ECHAS LOS PERROS, PANA?-
preguntó Mario, quien dio a entender que Simón y Rosalía harían pareja.
Siguieron la conversa, hablaron de Rosalía y de Carmen para volver
inevitablemente al tema de Norelys, puesto que Mario también se había dado
cuenta de ciertos detalles de la catira. -¿RECUERDAS LAS VECES QUE ELLA 
SALIA
CORRIENDO DEL SALÓN? PARECÍA UNA CORREDORA DE 100 MTS. PLANOS- Carlos estaba
empezando a incomodarse y trató de ignorar a Mario, pero este dijo este el
siguiente comentario -MUCHACHOS, NO SÉ SI CARLOS, PERO LES DIGO ESTO: 
NORELYS
ES UNA MUCHACHA MUY DULCE, PERO TODAVÍA NO LA HEMOS VISTO ENFADADA. POR
SUPUESTO, ESTABA PREOCUPADA COMO TODOS NOSOTROS POR ESTE EXAMEN, PERO HASTA
AHORA NO LA HE VISTO DE MAL HUMOR-. Los demás estuvieron de acuerdo con 
Mario,
a lo que Carlos respondió -PANAS, A MI ME HA TOCADO VERLA DE MAL HUMOR. SOLO
LES DIRÉ QUE ES ACONSEJABLE TENERLA DE BUENAS. ESO ES TODO-. Simón inquirió
-¿ES MUY ARRECHA, TIENE UN CARÁCTER TERRIBLE CUANDO ESTA DE MALAS? -.
- USTEDES NO SE IMAGINAN LO TERRIBLE QUE ELLA ES CUANDO LA HACEN ENOJAR- 
habló
Carlos antes de tomarse otro trago, acto que Jhonny impidió diciendo
-BRINDEMOS POR ROSALÍA, CARMEN Y Norelys-, -SI, ¡SALUD!- dijeron los demás y
brindaron.


En ese mismo instante, la catira encaraba a Raiza, quien era contenida por
unos hombres. -VAMOS PUES ¿A QUE NO ME HACES LO MISMO?- retó Norelys. Acto
seguido, Raiza se soltó de los caballeros, quienes la dejaron ir en pos de
la catira. Se puso enfrente, lanzó un derechazo, pero para sorpresa de los
presentes, Norelys lo esquivó con agilidad. Raiza volvió a lanzar otro pero
con igual resultado. Entonces se le fue encima a la catira. Craso error.


Trató de tomarle por los cabellos, pero Norelys se lo impidió agarrándole 
por
las muñecas y se las apretó. -¡SUÉLTAME, MALDITA!- gritó la atacante quien
empezó a patearle las canillas a la catira, quien se cubría como podía.
Haciendo fuerza, Norelys bajo las manos a su rival y la empujó, esta volvió 
a
atacar, lanzando otro golpe, pero la catira se agachó y le mandó un 
derechazo
a la boca del estómago que le sacó el aire. Con ese mismo golpe, Norelys 
alzó
el brazo y le dio un codazo en la barbilla, haciendo retroceder a Raiza. 
Esta
recuperó un poco de aire y después volvió a atacar, lanzándole un manotazo
con la derecha que neutralizó la catira al cubrirse con su brazo izquierdo.
Hizo un movimiento rápido y girando su brazo izquierdo envolvió el brazo
derecho de su atacante y le hizo una palanca, obligándole a extenderlo. La
presión que ejerció fue tal que Raiza gritó cuando sintió que su brazo 
estaba
a punto de partirse a la altura del codo. Entonces Norelys le conectó un
recto de derecha que hizo explosión en la cara de su rival. Sin soltarle el
brazo, le conectó otro golpe al rostro... y otro... y otro.


Justo en ese instante, en el bar, Jhonny propuso otro brindis - BRINDO POR
LAS MUJERES ARRECHAS, LAS DE CARÁCTER FUERTE QUE SE EMPEÑAN A DOMINARNOS-
-NOS TRATAN COMO NUESTRAS MADRES- soltó Simón, haciendo reír al grupo,
quienes alzaron sus jarras y brindaron -¡SALUD!-. entonces Jhonny dijo -OYE,
NOS PONES A NORELYS COMO UNA MUJER PELIGROSA- , -YA LES DIJE, ELLA ES
TERRIBLE- contestaba Carlos. Simón preguntó -¿Y NO HA LLEGADO A QUERER
TRATARTE MAL? YA QUE REPITES ESO- Carlos respondió -CHAMO, NO ME HA LLEGADO
A ALZAR LA MANO, Y ESTOY SEGURO QUE NO LO HARÁ. ELLA ME QUIERE, NOS 
QUEREMOS.
HEMOS ESTABLECIDO LAS PAUTAS DE RESPETO EN NUESTRA RELACIÓN, PERO LES DIGO
UNA COSA... ELLA TIENE PINTA DE SABER GIRAR LA MANO. ESTOY SEGURO QUE SÍ-. Y
por dentro decía -¡SI ESTOS GÜEVONES SUPIERAN QUE MI CATIRA LINDA SABE 
PELEAR,
QUE ES HASTA MI GUARDAESPALDAS! JA, JA, JA. ¡SE QUEDAN LOCOS!-. Y no quiso
entrar en detalles. Mario se dio cuenta que Carlos se comportaba como un
caballero al evitar dar detalles de su relación con Norelys y así les dijo
-BRINDO POR CARLOS, ES TODO UN CABALLERO AL NO HABLAR PAJA DE SU NOVIA, SE
COMPORTA BIEN. RECUERDEN QUE NUESTRAS MADRES SON MUJERES TAMBIÉN-. Entonces
Jhonny y Simón dijeron casi al unísono -ES VERDAD, BRINDEMOS. ¡SALUD!- Y
alzaron sus jarras. -GRACIAS- dijo Carlos. No siguieron hablando de sus 
amigas
y cambiaron de tema.


Mientras, en la calle, fueron seis los golpes seguidos que conectaba la 
catira
al rostro de su rival y que rompieron la boca y nariz de Raiza. A 
continuación,
Norelys pateó con su pierna izquierda a su atacante en los tobillos, al 
tiempo
que se movía a su derecha, haciendo que una casi desvanecida Raiza pierda el
equilibrio y quede de suspendida debido a que la catira la sostenía con la
palanca a su brazo izquierdo, sin dejarla caer. La agresora de Rosalía gritó
más fuerte esta vez. Entonces, Norelys, terminando de partirle el brazo a su
rival, que no fue tal, la envió contra un poste que tenía al lado, 
estrellando
la cara de Raiza contra este. Y eso fue todo.


Raiza quedó tendida en el piso, desmayada, sangrando por la boca y por la
nariz, mientras que Norelys, sin sufrir un rasguño, se dirigió a donde 
estaba
Carmen con Rosalía, las dos estaban pálidas por lo que vieron. -LISTO 
ROSALÍA.
ESTA BICHITA NO SE METERÁ MAS CONTIGO- dijo una Norelys orgullosa, mientras
que una asustada Carmen le preguntaba -CHAMA ¿DÓNDE APRENDISTE A PELEAR 
ASÍ?-
Todos los presentes quedaron atónitos por la agilidad de la catira y algunos
de ellos empezaron a auxiliar a la derrotada Raiza. Hubo de llamar a una
ambulancia, pues, tenía rotas la nariz y la boca, además de un brazo 
partido.
Norelys volteó y miro cuando ayudaban a levantarse a Raiza, quien recuperó 
el
sentido, por lo que se dirigió a ella -¡ESTO ES PARA QUE APRENDAS A NO 
ABUSAR
DE LOS DEMÁS! ¡NO VUELVAS A METERTE CON MI AMIGA!- Raiza miraba a Norelys 
con
terror, pues nunca antes nadie la había tratado der esa manera. Era una más
de las cuaimas, arpías, mujeres de mal carácter que siempre andaban por la
vida maltratando a los demás. Por eso la había dejado Leandro cuando se fijó
en Rosalía, una muchacha más madura y mas tranquila que su anterior novia,
quien a pesar del miedo que le infundía la catira mientras ésta la señalaba
con el dedo advirtiéndole, llegó a pensar -ME LA VAS A PAGAR, MALDITA, YA
VERÉ COMO, PERO ME LA VAS A PAGAR-. Norelys y sus amigas se regresaron al 
bar,
pues carmen ya no iba a hacer la llamada.


Regresaron al bar rápidamente. Lograron parar la hemorragia nasal que tenía
su amiga Rosalía. Todavía se sentía mal por lo que le había hecho Raiza, 
pero
le agradecía a Norelys por ponerla en su lugar. -ES UNA CARAJA MUY PELEONA.
SIEMPRE TENÍA PROBLEMAS CON LEANDRO...  INCLUSO LLEGABA A PEGARLE, PERO COMO
LEANDRO ES UN CABALLERO, NO LE HACÍA NADA. HASTA QUE UN DÍA DECIDIÓ DEJARLA.
FUE TERRIBLE PARA EL, PUES ELLA LLEGÓ A TUMBARLO CON ESE MISMO GOLPE QUE ME
DIO-. Entonces Carmen dijo -PUES LEANDRO SERÁ DÉBIL... O EN TODO CASO ESA
RAIZA ES MUY FUERTE. ¡PERO NO PUDO CON NUESTRA HEROÍNA! ¡NUESTRA CAMPEONA!- 
y
le levantaba el brazo a Norelys como cuando un réferi alza el de un boxeador
que gana una pelea. Norelys sonreía y después dijo -TENGO LA SENSACION DE 
QUE
ESA RAIZA NO SE QUEDARÁ TRANQUILA CONMIGO. LO LEÍ EN SUS OJOS-. A lo que
Rosalía agregó -SEGURO QUE SÍ. ELLA ES MUY VENGATIVA. TUVE LA SUERTE DE NO
TROPEZARME CON ELLA, HASTA HOY-. Llegaron al sitio y se consiguieron a los
muchachos conversando animadamente, quienes la vieron llegar, pero 
inmediatamente
observaron a Rosalía. Intuyeron que algo había pasado.


Entonces las chicas contaron la historia, dejándolos boquiabiertos. Entonces
Jhonny miró a Carlos y a Norelys diciendo -¡QUE COSAS TIENE LA VIDA!
¡ESTÁBAMOS HABLANDO DE TI, Norelys!-. La catira se quedó extrañada e
inmediatamente le preguntó a Carlos -¿QUÉ LES DIJISTE DE MI?- Carlos iba a
responderle cuando Simón se apresuró en intervenir -NADA MALO, SOLO 
ESTABAMOS
COMENTANDO LO BUENA NOTA QUE ERES COMO PERSONA. ESO ES TODO -. Pero la
conversación se puso interesante debido a que Carmen contaba con lujo de
detalles la forma como peleaba la catira -¡PELEA COMO UNA EXPERTA!-. Los
muchachos miraban a Carlos, quien se hacía el desentendido, mirando a 
Norelys
y cada tanto la besaba, mostrando en su mirada el orgullo que sentía por 
ella.
-¿Y ENTONCES, CATIRA? ¿NO NOS VAS A DECIR DESDE CUANDO LE METES A LAS ARTES
MARCIALES?- preguntaba Mario. Entonces ella al final solo contó que aprendió
a pelear desde que era niña, adornando un poco la historia. No dijo 
exactamente
qué la impulsó a tomar clases de defensa personal, dijo que lo hacia por
pasatiempo y nada más. Carlos notaba que ella no quería echar bien el 
cuento.


-¡BRINDEMOS POR Norelys!- Sugirió Jhonny alzando su jarra y todos también
alzaron las suyas. -¡SALUD!- y así pasaron el resto de la tarde. Cuando ya
los tragos estaban haciendo su efecto, Rosalía, la persona más sensata de
todos y todavía con el pequeño trauma provocado por el incidente con Raiza,
dijo que ya era hora de irse. Todos estuvieron de acuerdo. Simón, Carmen y
Mario se ofrecieron para acompañar a Rosalía a su casa, mientras que Jhonny
se iba a otro lado -PARA SEGUIR EL FESTEJO-. Norelys y Carlos se fueron por
su lado juntos. Así que todos se despidieron y cada cual tomó su rumbo.


Cuando ya se habían alejado del bar, los novios se dirigieron a una avenida
del centro este de Caracas que era conocida como la "Avenida de los 
hoteles",
debido a la gran cantidad de hoteles que había en su extensión, para saciar
las ganas de compartirse mutuamente.


Hicieron el amor, una y otra vez, hasta quedar exhaustos ambos, pero mas lo
estaría Carlos. Mientras estaban acostados, descansado ya para dormir, 
Carlos
le preguntó -ASI QUE PELEASTE DE NUEVO ¿NO?- a lo que Norelys respondió -SI,
LO HICE. ESA CARAJA PROVOCÓ A ROSALÍA. LE DIO UN TREMENDO GOLPE QUE LA TIRO
AL PISO. FUE BIEN CONECTADO.- y prosiguió -SUPE DESDE UN PRINCIPIO QUE ROSA
NO IBA A PODER CON ELLA. ESA RAIZA ES UNA BUSCA PEOS, UNA MALANDRA QUE SUPO
CONECTARLE ESE RECTO DE DERECHA. CUANDO VI COMO PATEABA A ROSALÍA EN EL 
SUELO,
ME SENTÍ INDIGNADA. ROSALÍA ESTABA INDEFENSA Y ELLA SEGUÍA PATEÁNDOLA, 
CUANDO
SE LA QUITAMOS DE ENCIMA, SOLO ESTABA LIGANDO A QUE ELLA DIJERA ALGO DE 
CARMEN
Y DE MI... COSA QUE HIZO.-. -¿QUERÍAS PELEAR CON ELLA?- preguntó su novio.
-CUANDO VI QUE LA TENÍA A SU MERCED SÍ. QUERÍA DARLE LO SUYO. Y SE LO DÍ-
Carlos le observó detenidamente y vio que no tenía ni un rasguño, quedando
admirado. -OJALA TE HUBIERA VISTO. FÍJATE QUE LOS MUCHACHOS ME PREGUNTABAN 
SI
TE PORTABAS MAL CUANDO TE ENOJABAS. HAN APRECIADO EN TI ESE CARÁCTER 
TRANQUILO
Y JOVIAL QUE DE VERDAD TIENES LLEGANDO A ESPECULAR SI ERES PELEONA O NO.
NO QUERÍA DECIRLES NADA. AL FINAL NO LE DIJE NADA, NO LES DIJIMOS LO QUE NOS
PASO AQUELLA NOCHE-. -NI LES DIRÁS... TODAVÍA NO- dijo Norelys.


Siguieron conversando y en medio del tema, Carlos le habló de la pelea que
vio en el metro el año pasado entre dos muchachas, una tipa corpulenta y una
flaca. Le contó lo que se acordaba de ese episodio. Norelys prestaba mucha
atención al relato, el cual le trajo los recuerdos de su infancia, aquel
episodio que cambiaría su vida. Una vez que Carlos finalizó, le dijo -AHORA
QUE DEFENDISTE A ROSALÍA, QUISIERA VER COMO TE DESENVUELVES FRENTE A ESA 
TIPA-
Norelys respondió -¿QUÉ? ¿ACASO ME CREES SUPERCHICA O LA MUJER MARAVILLA 
PARA
ESTAR DEFENDIENDO A TODO EL MUNDO? JA, JA, JA, JA. ¡CHICO!- ambos rieron y
se abrazaron, durmiéndose muy juntos y cómodos los dos.


Finalmente pasó la última semana del semestre. Presentaron las últimas
pruebas, entre ellas la de la materia "filtro" como llamaban a Investigación
de Operaciones I. Nuestros muchachos pasaron con igual nota del examen
anterior y salvaron la asignatura. Consiguieron pasar todas las materias del
segundo año y pasaron lisos al tercero, aunque las calificaciones 
desmejoraron
con respecto al primer año. Aun así, se daban por satisfechos, pues iban a
verse las caras todos juntos en le tercer año de la carrera.


En cuanto al campeonato de fútbol sala, el equipo de Carlos y Mario, "Mancha
Verde FC" pudo hacer el milagro, golearon a los "Osos Polares" por 9 a 1 y
tuvieron suerte de que se les dieran los resultados que los ayudaban a
clasificarse. Sin embargo, lo hicieron como segundos de su grupo, lo cual 
los
cruzó en la semifinal con el ganador de la otra serie. Hasta aquí llegaría
el equipo de nuestros protagonistas, pues luego de 50 batallados minutos y
de dos prórrogas de gol de oro en las que no hubo tal, quedaron empatados a
4 goles, yendo a la tanda de penales. Lorenzo siguió porteando, tuvo 
destacada
actuación el partido ante los "Osos", al igual que éste ante 
"Universitario",
su rival de turno. Pero aquí, en la lotería de los penales no tuvieron 
suerte.
El improvisado arquero no pudo adivinar un solo tiro, mientras que Mario 
tuvo
la desdicha de errar el suyo y el equipo cayó por 5 a 4 en la tanda, pasando
"Universitario" a la gran final, mientras que a nuestros muchachos les 
quedaba
el consuelo de disputar el partido por el tercer puesto, el cual ganaron por
forfait: el otro cuadro no se presentó. Volvieron a reunirse y acordaron
seguir juntos para el torneo del año próximo. Animaron a Mario quien se
encontraba deprimido.


Finalmente llegó el día de la fiesta. Los muchachos se reunieron y bailaron.
Carlos y Norelys siempre andaban juntos, al igual que Simón y Rosalía. Simón
iba a seguir el consejo de Mario, piropear a Rosalía, tratar de seducirla y
enamorarla, pero tuvo un desaire muy duro: Avanzada un poco la fiesta,
Rosalía le dijo que ya tenía novio, que su corazón ya tenía, pero que
apreciaba su amistad. Simón iba a ser el primero del grupo en abandonar el
lugar, sintiéndose completamente derrotado, dejando a Rosalía en una 
posición
incómoda, pues aunque estaba clara en cuanto a sus sentimientos, no quería
herir los de su amigo. No supo si quedarse en la fiesta o irse. Optaría por
lo segundo, pues Leandro llegaría sorpresivamente a la fiesta, llevándosela
consigo. Jhonny comentaría después -MENOS MAL QUE SIMON SE FUE RAPIDO ¿TE
IMAGINAS LA ESCENA CON SIMON ECHÁNDOLE LOS PERROS A ROSALÍA Y QUE EN ESE
MOMENTO LLEGARA EL NOVIO DE ELLA?. NO QUIERO PENSAR EN ESO. SIENTO LÁSTIMA
POR EL PANA SIMON-. Mario también se sentía un poco mal, sintió que había
llevado a Simón al matadero por sus consejos -TRATARÉ DE LLAMARLO ESTA NOCHE
PARA CONVERSAR CON ÉL-. La fiesta continuó.


Carmen también se iría temprano -ME ESPERAN EN OTRO LADO PARA IR A RUMBEAR
¿QUIEREN VENIR?- Jhonny fue el único que aceptó la invitación de Carmen
-¿DÓNDE ES LA COSA? IRÉ CUANDO SE ACABE LA RUMBA AQUÍ- le dijo a Carmen,
quien le dio detalles antes de irse. Mario estaba pendiente de una chica que
estudiaba en otra facultad, así que pidió permiso a los integrantes del 
grupo
que quedaban en la fiesta para ir con ella y abordarla, pues iba aprovechar
que la chica en cuestión andaba con unos conocidos suyos de otros cursos.
Jhonny se fue con él, así que nuestros protagonistas quedaron solos. Carlos 
y
Norelys se dispusieron a bailar y disfrutar el resto de la fiesta, 
compartiendo
con otros compañeros y amigos. Pero ellos no se percataron que unos
desconocidos que llegaron a la rumba los estaban observando. Sobre todo a
Norelys. Eran amigos de Raiza, la chica a la que la catira una paliza por
golpear a Rosalía. Fueron guiados a la universidad por la propia Raiza, 
quien
no se dejaba ver de los muchachos. Estaba en la fiesta, escondida, lejos de
la vista de la catira.


Se las mostró a sus amigos -ELLA FUE LA QUE ME JODIÓ. AHÍ LA TIENEN-. Eran
tres hombres, con aires de malandros, de pendencieros rudos, quienes se 
fijaron
en su objetivo. El que fungía de líder de ellos se llamaba Michael, quien 
dijo
a Raiza -TRANQUILA QUE A ESA NIÑA LA VAMOS A DEJAR PEGADA. TRANQUILA- Raiza 
se
puso ansiosa -BUENO, EN LO QUE ELLOS SALGAN DE AQUÍ USTEDES LOS SIGUEN-. La
fiesta siguió su curso.


Nuestros protagonistas estaban disfrutando de lo lindo. Bailaban, 
conversaban,
reían, cantaban cuando se escuchaba una canción conocida por todos. Pero de
repente, en un momento dado, Norelys tuvo una no muy buena sensación. 
Presentía
algo, a pesar del jolgorio del ambiente. Llegó a mirar a todos lados. -PERO
SI TODOS AQUÍ ESTAN DISFRUTANDO, AL IGUAL QUE NOSOTROS. ES UNA FIESTA SANA,
DESPUÉS DE TODO, PERO, QUIÉN SABE...- se decía la rubia, sin poder ubicar a
alguien con aire sospechoso. En cambio, Carlos no se daba cuenta de nada,
seguía gozando de lo lindo, muy animado. Norelys quería seguir celebrando,
pero esa sensación de ansiedad no la dejaba quieta, no la abandonaba. Así 
que
se las ingenió para convencer a Carlos de retirarse del lugar; sabía que iba
a encontrar resistencia de su parte, pero Norelys era una mujer tan 
encantadora
que nuestro amigo no pudo resistir. -AAAYY, MAMITA ¿YA TE QUIERES IR? ¡TÚ SI
TIENES RIÑONES! PERO... ESTÁ BIEN ¿A DÓNDE VAMOS ESTA VEZ?-. Norelys le
contestó -YA VEREMOS A DONDE, CARLOS, PERO SALGAMOS DE AQUÍ- y le dio un
beso. Se despidieron de sus amigos, compañeros y conocidos, saliendo del
sitio. Y desde un rincón alejado, uno de los compinches de Michael los vio
retirarse, advirtiendo a los demás. -¡LLEGÓ EL MOMENTO!- dijo Raiza, 
apretando
los dientes.

Nuestros protagonistas salieron de la escuela, luego de la facultad, siempre
tomados de la mano, para dirigirse a la salida en donde está cercana la
estación del metro, mientras que Raiza y sus malandros los seguían a 
distancia.
Una vez afuera, Carlos y Norelys se detuvieron y empezaron a deliberar -¿A
DÓNDE VAMOS, NIÑA?- preguntaba Carlos. -NO SE, SOLO QUERÍA DESPEJARME- 
entonces
Carlos, ya con cara seria volvió a interrogar -¿QUÉ TE TRAES EN MENTE, 
MIJITA?.
ESTÁS EXTRAÑA ¿QUÉ PASA?-. Norelys no tuvo más remedio que decirle -AY, 
CARLITOS,
VAS A DECIR QUE ESTOY LOCA, PERO ES QUE TENÍA UNA SENSACIÓN MUY RARA QUE NO 
ME
GUSTÓ. SENTÍA QUE ME OBSERVABAN, PERO HABÍA MUCHA GENTE-, Carlos se echó a
reír -JA. JA, JA... ¡DEFINITIVAMENTE ESTÁS LOCA! ¡CLARO QUE HABIA MUCHA 
GENTE!
Y TODOS ESTÁBAMOS PENDIENTES DE PASARLA BIEN-. -NO SE, CARLOS, PERO ERA ALGO
EXTRAÑO-. Carlos no terminaba de entender, y como quería pasar bien el rato,
invitó a su novia a caminar. -VENTE, VAMOS A DAR UNA VUELTA POR AHÍ-,
-¡VAMONOS!- contestó la rubia. Y abrazados se pusieron a caminar por la
avenida que pasa frente a la universidad. Era temprano, apenas las seis y
media de la tarde.


La avenida era ancha, tenía perspectiva de paseo, con la isla ancha en donde
había una caminería, también espaciosa, con árboles a los lados. La avenida
se dirigía hacia un paseo mas amplio, uno de los lugares preferidos por los
caraqueños para caminar junto a sus familias un fin de semana.


Dicho lugar contaba con áreas verdes muy espaciosas, con veredas utilizadas
para trotar. Había muchos trotadores a esa hora. Pero nuestros protagonistas
prefirieron seguir por la zona del paseo. Dieron dos vueltas para después
regresarse. En tanto, Raiza, Michael y sus compinches los seguían de lejos,
esperando el momento para actuar, aunque Raiza, a quien también acompañaba
una amiga suya, estaba ansiosa -¡COÑO! ¿QUÉ HACEN ESE PAR DE ESTÚPIDOS?.
¡¿CUÁNDO LOS VAMOS A AGARRAR?!-. -TRANQUILA, CHAMA- contestó Michael
-TRANQUILA QUE EL MOMENTO ESTA LLEGANDO-. Uno de los compinches de Michael
apostó -¿CUÁNTO VA A QUE SE VAN POR LA OTRA AVENIDA?-, a lo que el propio
Michael respondió -SI SE VAN POR DONDE TU DICES, ESTAMOS HECHOS-. La "Otra
avenida" a la que se refería dicho personaje también desembocaba en el 
paseo,
pero corre mas hacia el sur. Es la arteria vial principal de una 
urbanización
contigua al paseo que es considerada como zona roja, debido a la soleada de
sus calles una vez llegada la noche. Y ya el reloj marcaba las siete.


Carlos dijo -NORELYS, TENGO SED, VAMOS A UNA PANADERÍA -. A la catira no le
gustó mucho la idea de meterse a dicha urbanización para buscar una 
panadería.
Carlos quería tomarse un refresco, estaba deshidratado. Y eso que en la 
fiesta
solo llegó a tomarse dos botellas de cerveza, puesto que es un muchacho casi
abstemio, no bebía demasiado. Carlos mas bien odia la bebida, pero había que
pasar bien el momento dentro la celebración que había en la escuela. A
diferencia de Norelys, quien sí bebía, pero que había desarrollado, ya de
joven, una resistencia al alcohol. No se emborrachaba tan fácilmente. Se
dirigieron a la avenida y comenzaron a recorrerla, la cual mostraba todavía
un considerable flujo vehicular, pero los peatones empezaban a escasear en
sus aceras. -¡ESO!- festejó uno de los malandros, mientras que Raiza solo
sonreía maliciosamente, y los siguieron.


Caminaron tres cuadras para conseguir una panadería abierta. Se metieron y
consumieron. Afuera, en la acera de enfrente estaba el grupo que los seguía.
Mientras estaban sentados en una de las mesas del local, Norelys vio hacia
fuera y los vio, estaban Michael y sus dos compinches, mas no vio a Raiza y
a su amiga Judith. Se alarmó y le dijo a Carlos -¿VES A ESE GRUPITO QUE ESTA
ALLA AL FRENTE?- Carlos los ubicó -ME PARECEN SOSPECHOSOS. CARLOS, VÁMONOS
RÁPIDO-. Se apresuraron en tomarse las bebidas y marcharse del lugar. Se
dirigieron a la parada del autobús, cautelosos del grupo de enfrente. Se
dispusieron a esperar, y no había nadie mas allí, hasta que se acercó una
chica quien también se dispuso a esperar. A Norelys, que estaba mas alerta
de lo usual, le pareció darle mala espina la muchacha. Su instinto no estaba
equivocado: era Judith. -ALGO ANDA MUY MAL AQUÍ- pensó la catira y abrazó a
Carlos, quien estaba alerta también. Judith hacía ademanes que a nuestros
muchachos le parecieron extraños. Efectivamente, estaba llamando a los
malandros, quienes cruzaron la avenida y empezaron a acercarse.


Nuestros muchachos estaban por sufrir una emboscada.


Continuará.


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