JULIANA CONTRA ROSA, dos secretarias que se odian. Por JP 050, rqde55@hotmail.com noviembre 2004 Por fin Juliana y Rosa se quedan a solas en la oficina. No sabría por cual de esas dos hembras decidirme. Las dos eran del tipo de mujer que me gusta: Curvilíneas, agresivas y busconas de ventaja en la oficina por los medios femeninos a su alcance. Juliana, de unos 30 aos, rubia teida, ojos rasgados , boca grande de labios prominentes, amplias caderas, piernas muy rellenas pero bien formadas y atractivas y, sobretodo ... .unos pechos enormes, admiracin y excitacin de los miembros masculinos de la empresa. Juliana tenía novio pero todos la considerbamos una hembra por la que se podía tener esperanza de llegar a algo con ella, me refiero físicamente y ella ... ..parecía estar dispuesta a juzgar por sus coqueteos, de conseguir alguna ventaja usando sus encantos. Rosa, la enemiga nmero uno de Juliana. Mujer algo mayor que Juliana, 35-36 aos, tambin buen cuerpo, armoniosas y amplias caderas seguidas de poderosos muslos y musculosas pantorrillas. Brazos fuertes, hombros anchos, cintura casi de avispa. Su pelo, negro en melena corta. Rosa, casada, pero celosa a todas horas de los coqueteos de Juliana sin disimular su profundo odio por ella. Juliana disfrutaba provocando a alguno de los hombres ms mayores de la oficina y Rosa, competía en esa "actividad" pero era ms comedida, sus coqueteos eran moderados al revs que Juliana que era mucho ms osada. Ahí residía el odio de Rosa hacia Juliana, ya que, casi siempre, la rbia teida salía triunfante flirteando con los hombres y Rosa quedaba como "vencida" al margen de cada intento. A mi, me encantaba esa rivalidad, era como una fotonovela diaria, como un enfrentamiento entre hembras que me excitaba muchísimo pues, desde siempre, mi mejor morbo secreto eran las peleas entre mujeres. Desde hacía unas semanas, Juliana se quedaba a "terminar trabajos" al tiempo que el contable de la empresa para "ayudarle". Juliana contra Rosa -2- El seor Jos tenía unos 50 y pico aos y yo le había sorprendido mirando a Juliana ms de una vez: Realmente los ojos se le iban a menudo a las piernas de Juliana cuando las cruzaba al sentarse, a los inmensos bultos que provocaba en la blusa la gran medida de sus tetas. La competicin en el arte de ensear los muslos nos beneficiaba a todos, y Juliana y Rosa se esforzaban por calentarnos y de veras que lo conseguían. Las visitas al WC eran frecuentes, ya que despus de una sesin de cruce de piernas, a menudo nos encerrbamos en l para masturbarnos pensando en lo bien que nos lo pasaríamos si pudieramos "cazar" y llevar a la cama a una de esas dos impresionantes hembras. Naturalmente, entre nosotros desconocíamos los logros de los compaeros con ellas pero, fundamentalmente sobre Juliana, caían todas las sospechas de que ms de uno de nosotros había conseguido follrsela. Yo tenía unos 23 aos en esa poca y mis escarceos sexuales se dirigían casi siempre a nuestra criada, una seora gallega de unos 40 aos, poco agraciada pero con unas piernotas y unos pechos que hacían mis delicias cuando nos quedbamos solos en casa. Pero esa es otra historia y estamos hablando de Juliana y su rival Rosa. Juliana me excitaba muchísimo, bastante ms que Rosa y ella parecía darse cuenta pues trataba de entrar en mi despacho y preguntarme las cosas ms elementales, slo con el objetivo de ensearme las piernas y desabrocharse algn botn de la blusa que me hiciera soar con el impresionante volumen de sus pechos. He de reconocer que jams hubiera pensado en la posibilidad de tener a Juliana como nvia y, en consecuencia, mi inters por ella era nica y exclusivamente el inters de lograr llevarla a la cama y disfrutarla. Mi puesto en la empresa comportaba cierta responsabilidad pero, hallndome libre, podía intentarlo con Juliana y aprovecharme de que ella quería alguna cosa que yo le podía facilitar. El puesto de secretaría mía estaba vacante desde la boda de su titular, una mujer que se había despedido semanas antes. Juliana y Rosa competían ferozmente por ese puesto y se me "ofrecían" con todas sus armas. Asistir a esa lucha era muy placentero para mí, aunque, por supuesto, mucho mayor placer me daría verlas agarradas del pelo como dos fieras. De hecho, yo tenía la mejor oportunidad de mi vida para presenciar una pelea entre mujeres pero no podía permitirme el lujo de obligarlas a entablar un combate de lucha por dicho puesto, así que se me ocurri una frmula para conseguirlo. Juliana contra Rosa -3- En una de las ocasiones en que Juliana entr en mi despacho, vestida con una minifalda maravillosa y meneando exageradamente el culo hasta llegar a mi mesa, me dej absorber ms por ella y le empec a hablar de la necesidad de cubrir el puesto de mi secretaria. Que tenía dos candidatas que eran ella y Rosa y que estaba tratando de decidirme por una de las dos. Entonces sí ví encenderse los ojos de Juliana: Hablaba y hablaba contra Rosa, me decía que esa morena guarra nunca podría competir con ella, que ese puesto requería ser muy buena "en muchas cosas" y que si la elegía a ella, sabría "agradecrmelo" de modo muy placentero. Yo, por supuesto, no había considerado hacerle esa propuesta a Rosa, pues tenía claro que Juliana sería la elegida, pero quería enfrentarlas digamos discretamente, y disfrutar de sus miradas de odio y "zancadillas" que una a otra se iban poniendo. Efectivamente no fue necesario decir nada a Rosa porque la misma Juliana le cont lo del puesto y que no se le ocurriera hacer nada contra ella le "arrancaría todos los pelos de la cabeza". Maravillosa y excitante frase. En mi placentera estrategia acept las continuas consultas de Juliana hasta que, un día, le pedía que me llevara a mi casa en su coche. Sus ojos se iluminaron y salimos de la oficina mientras ella, le lanzaba una mirada de triunfo a Rosa que se la devolvi con el odio de una salvaje amazona. La mirada entre ellas ya me provoc ms ereccin que la idea de intentar que Juliana entrara en mi casa. Minutos despus, llegbamos a la misma y al detener el coche, Juliana, que casi me estaba enseando las bragas, me mir a los ojos ... .. -"No vas a invitarme a tomar una copa, cario ... ?" Cmo iba a negarme y adems, Juliana estaba ahora jugando sucio contra su enemiga Rosa y eso la convertía en presa fcil para mí. Al cerrar la puerta tras de mí, Juliana contoneaba las caderas andando hacia el saln. La tentacin era demasiado fuerte y al llegar a su altura perdí un poco la cabeza y le toqu el culo ... .. Juliana se gir hacia mí ... . Sonriente y, apoyndose en la pared se levant la falda mostrando completamente los amplios muslos e invitndome a besarla. No me hice de rogar y, al besarla en la boca cada vez ms apasionadamente mi pene crecía sin parar. Instintivamente llegamos al borde de la cama donde nos sentamos mientras el beso continuaba ... ..yo estaba excitadísimo y mi mano se fu, enviada por mi cerebro, a disfrutar de sus enormes tetas. Qu maravilla!!....mi pene alcanzaba ya la mxima dureza, completamente empinado ... . Ella sonreía complacida ... . Juliana contra Rosa -4- Casi sin darme cuenta me había quitado los pantalones y los slips y ella ya no llevaba bragas ... ... yo estaba loco de deseo ... .. Las manos de ella me volvían loco ... ... agarraban mi picha tiesa ... ..empezaban a masturbarme y luego se detenían ... ... ..qu locura! Tenía a mi alcance a esa hembra ... ... cuerpo de amazona ... ... muslos de dmina ... ... ... manos de puta ... ... ... Ya no podía esperar ms ... ..slo tenía que empujarla sobre la cama, montarme encima de ella y sería mía ... ..la habría conseguido! Al notar sus pezones erectos me decidí ... ..ella estaba tambin caliente ... ..hice el intento de tumbarla boca arriba en la cama ... ... .encontr resistencia ... ... ..ella no se dejaba montar!! Y yo, loco por follrmela!! -"UUUmmmmhhh mi vida ... ..me deseas? De verdad que me deseas? -" SI SI SI ... !" - desesperado por penetrarla. -"Pues antes de conseguir lo que quieres, dí que el puesto ser mío ... .."- -" Pero ... .yo ... .." -"Dílo!!.....dí que ser yo y no Rosa!!"- Fcil decisin, en ese momento lo que yo deseaba era follarme a esa puta aprovechada ... . -"SI, el puesto ser tuyo!" -"Jralo, jralo"- -"Te lo juro ... ... ser tuyo ... " A continuacin ... .experiment el inmenso placer de follar a una hembra de verdad ... ... .superaba en mucho a mi criada gallega ... ... Juliana era una autntica puta en la cama. Ya ni recuerdo la cantidad de chorros de leche que le metí en la chocha ... ... Juliana contra Rosa -5- Los siguientes días yo temía que ella hubiera contado lo de aquella noche a los dems pero no fue así. Ella quería mantener sus opciones en secreto y, sobretodo, no quería dar ninguna ventaja a su enemiga Rosa. Lo mejor para mí, no obstante, estaba por llegar. Unos dias ms tarde, Juliana me llam por la noche a casa muy excitada. Había tenido una fuerte discusin con Rosa por el puesto de secretaria y Juliana le había contado lo de aquella noche para provocarla y ganar ventaja sobre ella. Rosa, loca de celos y de odio le había dicho que, si se atrevía, la esperaba en la misma oficina despus de que se hubieran ido todos. Qu maravilla! , pens para mí y le pregunt a Juliana a qu hora habían quedado en encontrarse. Me dijo a las 10 en punto de la noche. Le hice creer que esa era una cuestin entre ellas dos y que yo no podía intervenir. Me dijo que seguro que ellas dos llegarían a las manos ... .que se pelearían y yo le contest que era lo ms lgico. Desde las 19:30 hasta las 22:00, yo tenía dos horas y media para encontrar el mejor lugar dentro de la oficina y ocultarme hasta que ellas llegaran. Mi excitacin era enorme ... ..por fin podría disfrutar de una autntica y real pelea femenina. Supuse que elegirían el suelo enmoquetado de la sala de reuniones. Era el nico lugar en donde había un espacio suficiente de suelo para pelear. Dicha sala tenía dos entradas y me ocup de que una de las puertas no se pudiera cerrar. Me escondí en el armario vestidor de mi despacho y esper ansiosamente la llegada de las dos mujeres. Rosa entr la primera. Como supuse, llevaba vestido corto, mostrando las piernas no slo para pelear mejor, sino para provocar ms odio en su enemiga. Como yo había supuesto, entr en la sala de reuniones como tomando medidas y a los pocos minutos, se sent mirando hacia la puerta en la que no estaba yo, lgico por su situacin desde la entrada de la calle , esperando la entrada de Juliana. Rosa cruz sus gordotas piernas de modo que se le vieran generosamente los muslos. Juliana contra Rosa -6- Eran las 21:55 cuando Juliana us su llave para entrar en la oficina y, al advertir que Rosa ya estaba dentro, cerr con dos vueltas y el pestillo para que nadie interrumpiera la "conversacin". Mirar andar a Juliana me causaba siempre excitacin. Llevaba una blusa de satn blanco y una falda corta de color rosa. Ambas lucían zapatos de tacn. Cuando Juliana entr, Rosa sigui sentada mirndola a los ojos con el odio ya no habitual sino muy superior. -"Por fin las dos solas, eh, encanto ... ?- Rosa tuvo una "cariosa" pero envenenada bienvenida para Juliana. -"Pues si, "reina" ... ..t dirs para qu querías verme a solas, ya que como te coment, lo del puesto de secretaria el jefe lo tiene ms que decidido"- -"Eres una sucia traidora ... ..no tardaste nada en llevrtelo a la cama , guarra, para conseguir lo que querías ... .!"- Rosa se puso en pi. -"Si lo hubieras visto, preciosa, estaba calentísimo ... ..loco por mí ... ..me suplicaba de rodillas que me dejara follar ... .." -"Puta !!.....poco debi suplicar ante una ramera como t!!".dijo Rosa, excitada. -"Nada de eso!!....le hice jurar que me daría el puesto antes de dejar que se me pusiera encima ... .jajaja ... ..si hubieras visto como juraba ... .jajaja ... " Las dos mujeres estaban ya a un metro escaso de distncia entre ellas ... ..mirndose a los ojos ... ..gritndose ... .amenazndose ... . -"Aprtate de l lo lamentars, cerda!!"- gritaba Rosa. ."Ah si ? UUUyyyy qu miedo ... .qu me vas a hacer, cielo??" La resistencia de Rosa lleg al límite ... ... .en segundos las dos rodaban por el suelo como dos leonas ... ... ..qu excitante espectculo yo estaba disfrutando!! Agarradas del pelo cada una trataba de subirse encima de la otra ... .los gritos se sucedian a cada esfuerzo ... .. Juliana contra Rosa -7- En un momento Juliana qued sobre Rosa y trat de abrir sus piernas para montar a horcajadas sobre su enemiga ... .pero pronto la morena se la quit de encima y volvieron a rodar y rodar ... .. Mi excitacin se incrementaba por momentos ... ... .mi pene comenzaba a crecer ante la pelea de las dos hembras ... .. En uno de mis poquísimos pestaeos ... ..escuch el grito de satisfaccin Juliana al lograr montarse a caballo sobre la barriga de Rosa!! Sin perder un segundo, Juliana maniobraba ansiosamente por inmovilizar a su enemiga. Rosa miraba, horrorizada, como las gruesas rodillas de Juliana se acercaban peligrosamente a ponerse sobre sus brazos. Si lo lograba ... ... estaría perdida y en poder de esa furcia ! Por suerte para ella, aprovech un mínimo descuido de su enemiga y con un fuerte arqueo de su cuerpo , consigui echarla de encima. La pelea era ahora ms feroz ... ... .estando las dos en pi ... ..Rosa tuvo la mala suerte de tropezar y caer sobre la moqueta ... .qued en el suelo boca arriba ... . Juliana ... ..con un grito gutural de victoria que jams le había oído exclamar ... se lanz como una pantera sobre la morena con las piernas abiertas y dej caer todo el peso de su culo sobre los pechos de Rosa que qued aturdida por el dolor. Instintivamente, se aposent montada a horcajadas sobre Rosa tratando una vez ms de inmovilizarla. Aunque medio atontada, Rosa, y tambin yo, pudimos ver que Juliana metía su mano nerviosamente dentro de la parte posterior de sus bragas ... .. No podía creerlo ... ..Juliana , no s cmo, extrajo de sus bragas una pequea navaja automtica !! La abri ante los horrorizados ojos de Rosa. -"Dios mío!!!"- exclam la morena ... .que por suerte alcanz la mueca de su enemiga, deteniendo sus intenciones ... .. Yo no me perdía detalle ... ..no sabía ... .no me atrevía a intervenir ... ..no sabía si Juliana slo quería asustar a Rosa con el cuchillo. La rubia teida no ofrecía dudas ... ... . acercaba ms y ms el cuchillo a la garganta de Rosa ... ..aquello se había convertido en una pelea a muerte!! Juliana contra Rosa -8- Rosa slo podía patalear ... ... ..Juliana la tenía perfectamente inmovilizada y se reía a carcajadas nerviosamente ... ..sdicamente ... ... . -"Ya eres mía, puta ... ... no saldrs viva de aquí!!" Rosa estaba desesperada ... ..se estaba meando encima ... ... el miedo la atenazaba y le impedía pelear ... Juliana estaba casi feliz ... ..una de sus pesadas rodillas ya aplastaba el brazo libre de Rosa contra la moqueta ... ..su otra rodilla buscaba vidamente ponerse sobre el brazo que cogía la mano del cuchillo de Juliana ... . El culo de Juliana se paseaba sobre las tetas de Rosa ya a placer ... . Mi pene estaba ahora a la mxima ereccin y yo no podía evitar masturbarme, tal vez porque no me creía que Juliana quisiera matar a Rosa ... ... era realmente increíble!! De pronto, la mano de Juliana logr librarse de la oposicin de Rosa, pues su rodilla aplast el brazo de la morena y dej a la rubia teida perfectamente montada sobre su enemiga y a Rosa totalmente a merced de Juliana. La rubia teida estaba disfrutando y yo lo percibía claramente. Con el cuchillo en su mano derecha ... .meneaba el culo sobre Rosa como tratando de lograr un orgasmo encima de ella ... ... .yo no podía ms de excitacin!! Ví enseguida que Juliana no mataría a Rosa pero la morena no pensaba del mismo modo que yo y ... ..aprovechando que Juliana parecía dedicarse a disfrutar su triunfo, hizo acopio de todas las fuerzas que le quedaban y ... ... zaaaaassss ... ..arque con rbia su cuerpo lanzando a Juliana de espaldas sobre la moqueta!!!! Eso fue fantstico!! Juliana perdi el cuchillo y Rosa ... ..a la desesperada lo atrap mientras, como una leona salvaje se lanzaba sobre su enemiga rubia y se montaba a horcajadas sobre ella en una perfecta presa de inmovilizacin igual que ella la había tenido unos minutos atrs!! Juliana contra Rosa -9- Yo no daba crdito!! Ahora era Rosa la reina ... ... me fascinaba mirarla usando sus gorditas piernas igual que la otra mujer las había usado para inmovilizarla. Era instintivo ... ..las colegialas tambin usan esa clsica inmovilizacin para humillar a una rival. Ahora era Rosa la que tenía la cara de Juliana totalmente sujeta entre sus poderosos muslos!! -"Ya te tengo, guarra!! " Disfrutaba ahora Rosa esgrimiendo el cuchillo de Juliana. La rubia teida pataleaba al aire intilmente. Imposible alcanzar a Rosa. La excitada morena agarr a Juliana del pelo con su mano izquierda ... .y con la derecha acerc el cuchillo al cuello de su enemiga ... .. Juliana no decía nada, sabedora de lo intil de suplicar a una mujer que la tenía en su poder y que, adems disfrutaría de su puesto y de su jefe. Adems no podía escapar ... ... Rosa le había hecho la mejor inmovilizacin. Estaba claro ... ..ahora Rosa sonreiría de placer ... .y la mataría!! Yo tambin estaba seguro de que eso no iba a suceder. Conocía a Rosa muy bien. Efectivamente ... .Rosa habl: -" Mírame, puta!!" Juliana obedeci ... ... -" Suplícame clemencia no saldrs viva de sta habitacin!!" Juliana grit varias veces: -" SI SI ... SI ... CLEMENCIA ... .CLEMENCIA!!" -"no NO, BRUJA ... .SUPLÍCAME ... .suplícame clemencia!!" -"Te suplico ... ..te suplico clemencia!" -"Otra vez ... .OTRA VEZ ... .SUPLÍCAME!!"""Rosa sentía una excitacin muy placentera por el timbre de su voz. -"CLEMENCIA ROSA, TE SUPLICO CLEMENCIA ... ." Juliana contra Rosa -10- Estaba claro que Rosa quería humillar a Juliana. -"Ahora, hija de puta ... ..dí que te rindes y suplícame humildemente perdn por todo lo que me has hecho sufrir!!!"- -" SI SI ... .lo que quieras ... .." -"DÍLO, PUTA !" -"ME RINDO ... ME RIDO ... . TE SUPLICO humildemente perdn por todo lo que te he hecho sufrir ... ." -"No te voy a matar, guarra pero ahora mismo JÚRAME que no vas a volver a la oficina NUNCA ms y que yo tendr el camino libre ... ... ... .JÚRAMELO " TE MARCO LA CARA PARA TODA LA VIDA!!" Juliana lloraba ... ..humillada ... ... su cuello soportaba la humedad de las bragas de Rosa, excitada de victoria ... ... -"LO JURO ... ..TE LO JURO ... .me ir ahora mismo ... no me vers ms!!" Rosa era feliz ... .sonreía sentada sobre Juliana ... ..no quería soltarla ... ..el placer de tenerla dominada la enloquecía ... ... ví enseguida que no la dejaría así ... ... ... ... de pronto ... .Rosa comenz a abofetear la cara indefensa e inmovilizada de Juliana ... PLAS PLAS una y otra vez ... . Luego los bofetones se volvieron puetazos COP COP COP ... ..Rosa disfrutaba pegando a Juliana puetazos en la cara hasta que la dej sin sentido ... .. Luego se levant ... ..recogi el cuchillo de Juliana como trofeo y dejndo a su enemiga desmayada en el suelo, sali de la oficina. Rosa nunca me cont nada de la pelea ... ... pero pronto le ofrecí el puesto y fue muy cariosa conmigo. Sus comentarios a JP rqde55@hotmail.com