Las Defensoras del Castillo ( Primera parte )

Por: Elvencidotememf@hotmail.com

Tatlan era la ciudad mas grande de toda el area selvatica del sur de la isla de Katuro, en realidad era un centro ceremonialdonde se destacaban avanzadas construcciones en piedra que siglos mas tardes sorprenderian a arqueologos y turistas. Dicha civilizacion tatlana jamas habia tenido contacto con el hombre blanco. Pero eso cambio por completo el dia en que los vientos del azar llevaron hasta sus costas las naves del corsario Brew Krunt.

El y sus hombres venian hullendo de las flotas del imperio que furiosas se deslizaban sobre las olas del oceano Pacifico en busca de esos malditos piratas que asaltaban por igual barcos comerciales como tranquilos pueblos pesqueros donde irrumpian para robar tesoros y jovenes mujeres.

La mayoria de las embarcaciones tenian daños serios en sus estructuras debido a los cañonazos recibidos en la batalla con la flota imperial, lo que indicaba que la estadia en la nueva isla iba a durar algunas semanas. Los indios en la costa contemplaban con confusion aquellos enormes barcos que llevaban gigantescas telas extendidas.

Tanto Krunt como varios de sus hombres sabian hablar muchos idiomas aborigenes y trataron de establecer conversacion con los indios para saber si eran hostiles o amistosos pero mas importante aun saber si el imperio dominaba esa isla. Un doble alivio resulto saber que dichos nativos eran muy amigables y que jamas habian visto hombres blancos. Sus mismas costumbres religiosas les ordenaban tratar a cualquier extraño viajero con la mejor hospitalidad posible. Por supuesto que dichos aborigenes ignoraban por completo a que clase de seres humanos estaban hospedando en la tierra de sus ancestros.

Krunt no se molesto en investigar mas sobre el asunto al darse cuenta que se encontraba ante el mismo tipo de amistosos aborigenes que habia visto decenas de veces en cualquier costa de Oceania o en la reciente America, por lo que decidio dedicarse de lleno a la reparacion de las naves. Lo de vital importancia ahora era salir de aquella isla antes de que fuera encontrado por sus enemigos que llevaban muchos años tras el, ademas la isla no parecia ofrecer nada especial y los indios no tenian nada que valiera la pena quitarles.

Con la ayuda voluntaria de los hombres locales que demostraron ser eficientes y laboriosos el trabajo fue terminado en menos de dos semanas viendose el aspecto de las naves como si hubieran sido recien construidas. Todo estaba listo para zarpar de nuevo al mar y llegar al caribe donde guardaban lo robado para luego seguir con el ultraje de barcos y paises.

Pero para no quedar mal con los indios decidio esperar un dia mas para participar de una ceremonia festiva que comenzo desde muy temprano con la reparticion de muchisima comida y bebidas alcoholicas hechas de diversas frutas dulces. Durante la reparacion casi solo se miraban hombres pero con la fiesta se vio llegar a muchas mujeres que para sorpresa de los extranjeros estaban completamente desnudas debido a que esa era la costumbre ceremonial ya que solo asi el dios de los huracanes puede ser apaciguado. A medida que iban llegando ellas danzaban alegremente con la musica de los primitivos instrumentos de cuerda, caracol y tambores de madera.

Casi inmediatamente cinco hombres blancos se acercaron a las indias sin ninguna prudencia dispuestos a seducirlas como si fueran rameras baratas de Londres. Ellas no comprendieron al principio las intenciones de los mismos pero la tranquilidad se acabo repentinamente cuando uno de ellos se arodillo ante un hermoso especimen de piel canela y sin mas ni menos le hundio su boca en la vagina comenzando a succionar el fruto mas prohibido del mundo. Ella volteo a ver extrañada sintiendo un poco de exitacion pero una profunda vergüenza debido a que era casada y según sus tradiciones ni siquiera el mismo marido podia hacerle eso en cualquier lugar donde los pudiera ver otra persona, lanzo un grito agudo desesperado, agarro a su agresor del pelo y lo lanzo al suelo. Pocos vieron lo sucedido en medio del alboroto de la multitud y la oscuridad de la noche, unos de ellos fue Krunt quien al percibir con su sagaz instinto que aquella escena podria ser el inicio de una confrontacion con los indios trato de detener a su hombre corriendo hacia el pero con tan mala suerte que sin fijarse se golpeo la cabeza en la rama de un arbol quedando adolorido por unos minutos en el suelo arenoso.

Mientras tanto el maldito ingles se levanto y quiso someterla agarrandola de los brazos pero los macizos miembros de la enorme india que media cerca de 1.90 metros no se movieron nada a pesar de haber empleado su mejor esfuerzo, entonces ella lo rechazo con facilidad y lo empujo atrás. El quedo confundido y con miedo al comparar mentalmente su fuerza con la de la india. Le parecia increible que el siendo un marinero forzudo de casi 1.95 metros que habia matado a duros hombres con sus propias manos y habia sobrevivido a las pestes del mar fuera mas debil que una mujer aunque se tratara de una salvaje.

Por un momento el viento suave de la noche penetro sus carnes como un presagio superior imposible de resistir llegando a provocarle escalofrios que lo hicieron reflexionar sobre la situacion y penso en alejarse de ella para evitar cualquier problema. Pero las risotadas de sus amigos le hirieron el orgullo como si se tratara de una lluvia de flechas o un ataque de abejas. Entonces enfurecido arqueo el brazo y lo llevo hacia atrás cerrando el puño para descargar un terrible derechazo en la cara de la mujer que sono como el choque de dos maderos, tan fuerte fue el golpe que el se quedo doliendo los nudillos pero ella apenas se movio un poco y estallo en furia por la insolencia del extraño, y tomando al ingles por el cuello con ambas manos lo levanto apretando con mucha fuerza, cortando la respiracion del marinero que pataleo y manoteo con todas sus fuerzas sin lograr liberarse. Entonces se armo un pequeño tumulto de personas alrededor de ellos tratando de soltar a la victima que estuvo a punto de perder la vida. Siete hombres tuvieron que jalar los brazos de la mujer para que los quitara del cuello del ingles.

La musica paro asi como la fiesta en general que no llego a durar mas de unos veinte minutos desde la llegada de las mujeres. Al enterarse de lo sucedido el jefe indio le dijo a Krunt que su hombre merecia la muerte por el irrespeto cometido. Inteligentemente el viejo pirata le recordo al jefe cierto dicho de ellos mismos en el que se decia que un extraño debe de ser perdonado de algo que no conoce y le dijo que en Europa era una costumbre ceremonial normal besarle la vagina a una mujer desnuda para honrar al dios de la fecundidad.

Visiblemente molesto por la habilidad del viejo leon de mar el jefe accedio al perdon con solo que el marinero pidiera perdon. Pero un ambiente de duda quedo en el ambiente donde ahora solo se percibian miradas serias a la luz de las antorchas. Krunt les reitero su amistad y le prometio al jefe regresar algun dia con hermosos regalos exoticos para demostrarselo. En realidad los indios estaban desarmados y seria facil acabar con ello pero el problema es que las armas estaban guardadas en los barcos y ningun extranjero tenia intenciones de arriesgar la vida con indios pobres a quienes no conocen.

Andrew, el ingles vencido y casi muerto por la enorme mujer iba cabizbajo muy triste. Sabia que el capitan no lo regañaria ya que el nunca regañaba a nadie aunque cometiera una falta grave, Krunt simplemente elevaba de nivel a alguien, le imponia un castigo o lo lanzaba amarrado al mar para que muriera ahogado pero el resto del tiempo era como un buen padre para todos los piratas.

El temor de Andrew era con sus compañeros ya que su apuro le habia costado a sus muchos compañeros el tener que renunciar a una posible compañía femenina, probablemente la unica en años para muchos y para algunos la ultima de sus miserables vidas.

 

Continuara....